un lugar llamado Utopía

nubes

Hoy el dia está nublado, no llueve por ahora.
Los nubarrones parecen haberse estancado en las cabecitas de algun@s.
Vivo en una casa adosada junto a otras tantas. Mi habitación da al patio común de vecinos donde cada cual tiene su lavadero pero donde todos se unen por tabiques, y así es como sin quererlo a veces me entero de todo. Y es que hoy todo actúa como un proceso en cadena.
Además, hoy 16 mi padre ha entrado a trabajar de vuelta de las vacaciones y eso se nota. Está harto, deseando jubilarse y dedicarse a otras tareas más placenteras.
Mi madre ha llamado al enano de la casa para discutir unos asuntos, a los cuales mi hermanito obviamente no se ha dejado y la discusión se volvió en refriega de palabras. Ellos dos acabaron haciendo las paces y besándose, pidiendo disculpas por la respuesta verbal.
Mis vecinitos. Los de enfrente, la hija pequeña parece soprano, nada más que por las voces que da para referirse a sus hermanos o al perrito, que lamentablemente tienen en su lavadero. Y ellos, quizá porque son de este pueblo y yo no, no los entiendo ná.
A la derecha está la casa de los 1/2 guiris. Cuando están ellos sólos (una pareja de ancianitos disfrutando de su jubilación en Andalucía tras 30 años en Londres), su acento cordobés se nota a leguas. Pero cuando llega la family de vacances, madre mia, que bastos son. Hacen una mezcla tan extraña. Me paro a pensar si cuando yo por ejemplo que no tengo ni idea de inglés, me pongo a chapurrear el inglés, diré tantas palabras mal sonantes como cuando la escucho a ella.

Después de 13 años en este pueblo, sigo sin sentirme de él. Mi casa me está esperando en otro lugar. Ésto sólo es una parada en el camino.