un segurata en apuros

Como normalmente tenemos muchas horas por delante en los servicios, yo todas las que puedo las dedico a leer pero tener tantas horas tiene un inconveniente, no tengo tanto dinero como para comprar los libros que necesitaría para cubrirlas con la lectura, por lo que leo todo lo que cae en mis manos, desde publicidad (algo muy interesante si se analiza con detenimiento), pasando por revistas, hasta releer una y otra vez los libros que mas me gustan.

Hace unos días comencé una vez mas a releer los libros de Anne Rice, Confesiones de un Vampiro, Lestat el Vampiro, y La Reina de la Oscuridad, y en mas de una ocasión me parecía que las descripciones que hace de los Vampiros se ajustaban perfectamente a lo que llegamos a ser los Vigilantes.

Somos seres nocturnos, mayormente solitarios y si nos reunimos lo hacemos en grupos reducidos donde la amistad y la convivencia es difícil.

Los jóvenes siempre buscan en el oficio el misterio y el mito inalcanzable, y los viejos solo quieren soledad y tranquilidad, destruyendo a los jóvenes y sus ilusiones a la mínima oportunidad, sobre todo si intentan pisarles el terreno.

Las familias no nos comprenden, y solemos ver la vida de los demás mortales desde lejos, siempre deseando poder ser como ellos, y viviendo sus vidas a través de sus imágenes.

En cuanto al físico, los ojos nos lloran con la luz fuerte, la piel suele tener un blanco cerúleo alarmante y nos quemamos con una ligera exposición al sol.

Solo nos falta chupar sangre (que alguno algo chupara), y vivir eternamente......