un segurata en apuros

Pepote circulaba por la SE-30 a gran velocidad a estas horas,( las cuatro de la mañana), se puede circular como si fueras por el circuito de Jerez, con el coche a toda potencia.

De pronto una mancha blanca se cruza en su camino un golpe, una larga frenada,¡¡ostia, ostia!!, me he cargado a alguien.

Parada en el arcen, un minuto para recuperarse y se hecha abajo corriendo hacia el otro vehículo. Pero donde esta, no lo encuentro, donde esta, no estoy borracho ni nada, corro por la carretera, de un sitio a otro, diez quince minutos, al fin, en la vía de servicio, sobre la acera, un AX blanco con un porrazo, pero donde esta el conductor?, además, esta sobre la acera, entre dos postes, como si estuviese aparcado.

Trae su coche tiene un gran golpe en el lado izquierdo pero todavía funciona aunque pierde liquido, aceite quizás.

Llegan dos vigilantes, lo encuentran en cuclillas con una barra de hierro en las manos, les explica lo ocurrido y lo miran con cara de no creerlo.

Llegan seis guardia civiles, tampoco lo creen, buscan al otro conductor, no lo encuentran, le hacen la prueba del alcohol y da negativa. Lo interrogan varias veces, creen que a escondido el muerto, porque con el porrazo que tienen los coches el otro si no esta muerto le falta poco, pero no hay sangre, donde esta?.

Los vigilantes bromean, creen que pepote a escondido el muerto en algún sitio, los civiles también lo creen, pero tras dos horas de búsqueda e investigación comienzan a creerlo, pepote ya esta mas tranquilo y es mas coherente en sus explicaciones, el conductor quizás a huido, aunque el coche no es robado, quizás fuera un menor o no tiene papeles.

Bien se puede marchar llamaremos una grúa para su vehículo, todos se dan las manos, los vigilantes a los civiles y a el, el a los civiles, al fin parece realmente un velatorio y que todos se dan el pésame, aunque el vigilante guasón sigue haciendo comentarios sobre muertos.