Para acompañar las comidas se utilizan unos ambientadores con aromas a tradición, mi sobrina dice que estimulan los sentidos, pero el que supuestamente huele a cocido creo que les ha quedado un poco agrio, tal vez estará pasado. Aunque a las (casi) cincuentonas como yo, nos estimula, sí, pero sólo el recuerdo y acentúa con ello las ganas que tengo de ver a mi madre, que sigue cocinando manjares que huelen de maravilla, nunca ha hecho cocido, pero el huerto de mi padre le suministra excelentes verduras, sobretodo tomates que huelen a tomate y con ellos el sofrito para cualquier plato es una delicia. Vivir en el monte es una suerte, si no fuese por el constante miedo al desastre medioambiental. Cada vez menos especies soportan este tiempo extremo y el cambio se ha producido demasiado deprisa, yo tampoco lo soporto. Por eso sigo en la ciudad, utilizando estos tejidos y potingues que nos aíslan del dañino ambiente, aquí la única especie que veo morir en vida es la humana, y que como dijo hace más de veinte años en un foro un tal Efedito, dicha especie está sobrevalorada. Ella y sólo ella la que un día creyó en la existencia (que todavía busca) de vida fuera del planeta se ha cargado la mayor expresión de vida jamás existente en todo el universo conocido, miles de especies que conservamos artificialmente porque no supimos hacerlo mejor.
Alguien ha podido ser positivo con el temita que se ha propuesto como post global ¿?... voy a ver si fatalidad habla de su niña y alegra la cosa.
Posteado por: rita el 1 Septiembre de 2003 a las 19:29Fatalidad no está, en fin... dentro de un ratito, cuando sea mañana colgaré el doble post que debía ser el de hoy y que al menos no me hace pensar en mis 50 años...arrrg
Posteado por: rita el 1 Septiembre de 2003 a las 20:14