Nunca es tarde para una buena lectura, de ésas que te dejan algo, un resabio de aventuras que te hacen cosquillas en el estómago. Así, demoré tres noches en leer 20.000 leguas de viaje submarino. El amigo Julio Verne, merced a su capitán Nemo, me llevó a pasear por debajo de las aguas que conforman los océanos Pacífico, Índico, Atlántico y Antártico.
Ciertamente, la mezcla de ficción y realidad que realiza Verne es inquietante. Así, nombra y describe las regiones y los mares por tod@s conocid@s... pero añade datos curiosos. Por ejemplo, hay un túnel natural y subterráneo que conecta el Mar Rojo con el Mediterráneo en pocos minutos (y no es el Canal de Suez); un cementerio submarinoescondido en el océano Índico, en un paraje inaccesible para los tiburones, donde entierran a los tripulantes del submarino que fallecen; un islote que provee a Nemo del carbón necesario para el funcionamiento del Nautilus, y cuya mina es el interior de un volcán apagado; la Atlántida, ubicada alrededor de la isla de Tenerife, en territorio español... Y, lo realmente inquietante, Verne nos cuenta que en el punto exacto donde está el Polo Sur hay... un mar.
Cuando leí esa parte, no lo entendí. Acostumbrado a las modernas imágenes fotográficas que me enseñan una inmensidad blanca de hielo, me pregunté de qué estaba hablando ese tipo. Pero, una vez hube terminado la lectura, se me ocurrió que, tal vez, el genio de Verne anricipó, no el futuro inmediato de ese continente, sino el futuro a largo plazo, cuando los estragos del efecto invernadero se hagan patentes en el descongelamiento de los polos.
Y el final me deja con la incertidumbre más completa: ¿qué sucedió con el submarino? ¿Logró escapar del remolino que lo arrastraba? ¿Continuó asolando los mares en busca de venganza? O, por el contrario, ¿llevó a sus tripulantes hacia una muerte horrible en los abismos? Vos, que también leíste este libro inquietante y genial, ¿qué pensás?
Cuando era pequeña, alucinaba con los delirios futuristas de Verne y las odiseas temerarias de Salgari. Se me piantó un lagrimón.. Gracias.
Comentado por MorganLo más increíble es que Julio Verne nunca salió de viaje.
Comentado por A.Morgan: ¿Te aocrdás de la colección Robin Hood? Qué tiempos aquellos, sñig... =(
A.: Cierto. Las grandes obras se gestaron siempre en el encierro de cuatro paredes. =)