Tres de la madrugada del domingo. Buenos Aires brilla bajo el baño de luna llena que le proporciona esta noche mágica y fría. Fría, por el clima invernal que invade sus calles y avenidas. Mágica, por el encadenamiento de sucesos que se desarrollaron en las últimas horas.
Horas. Tiempo intangible que se nos escurrió entre los dedos casi sin que nos diéramos cuenta, entre caminatas, una pequeña decepción imprevista, y luego sí, risas, temas varios, buena compañía, cierta intimidad y mucha calidez... ¿qué puedo decirte? Fue lindo.
Apenas eso... tanto y a la vez tan poco.
¿Sabés? Son extrañas las ocasiones en que no me sirven las palabras; cuando siento que nada de lo que digo o intento expresar puede compararse con el momento vivido en sí. Y esta es una de ellas. ¿Cómo explicar el cúmulo de sensaciones que se sucedieron en mí, y que aún ahora, mientras intento decir algo sin decirlo, tienen lugar?
No, no voy a explicarlo. No es necesario. Y es algo que me gustaría preservar... para los dos. Post críptico, para el profano, tal vez. Pero... ¿y qué?
Sé que ahora estarás durmiendo. Ojalá tengas dulces sueños. Y, cuando leas esto, quiero que sepas que sólo puedo decirte: Gracias por tu hermosa compañía. Te quiero.
Escrito por J.E.L.:-)
Comentado por ariadna:-)
Comentado por MATRIXsi muy lindo, muy romanticon, muy tierno su post pero ....POSTEE SR. MATRIX Y DEJESE DE ENSIMISMAMIENTOS!!!!