Nuestra Inmensidad...

¡Esta es muy bonita!. ¿Han tenido el sentimiento de cuando hay brisa fría, pero es un día soleado y luego se ponen un abrigo calientito?, pues más o menos eso es lo que siento cuando veo esta foto. Como si las montañas estuvieran frías por el viento y las nubes son el abrigo caliente.

En esta foto se puede ver como los rayos del sol se meten entre las nubes... Es difícil explicar lo que pienso cuando la veo.. pero lo voy a intentar... Imaginen que esa foto no tuviera luz, que el sol no estuviera, después poco a poco va entrando el sol, explorando los lugares que va iluminando, como con curiosidad y las nubes se van despertando de un sueño pesado, por lo cual no son del todo blancas y solo se ilumina su contorno... Cuando me escucho relatando lo que siento, ¡me parece una locura! simplemente no me imagino a otra persona entendiendo lo que digo o tan solo imaginarselo, pero bueno... todos estamos un poco locos de una u otra manera jajaja.

Simplemente me quedo sin palabras para expresar lo que siento cuando veo esto.

Hay tanto que admirar y tan poco tiempo se le dedica... A veces se pueden observar cosas que no pasan todos los días y nos dejan pensando en ellas, como se puede ver en estas fotos...

Las nubes son estructuras en constante movimiento que a veces se tornan en figuras concretas, otras en abstractas. A mi me gustan ambas y he tenido la dicha de poder captar fotos hermosas que, aunque la mayoría sean tomadas con el teléfono, se puede apreciar tan divina figura que nos trata de comunicar algo. Un simple huequito entre las nubes grises, que deje ver el cielo azul, brillante, significa que aunque sea un día apurado y en medio de la ciudad, podemos tomar unos segundos para admirar una de las bellezas que Dios nos dejó cerquita, cosa que la mayoría de las personas no hace.

Cuando veo las nubes desde arriba, en el avión, recuerdo mucho a mi abuelita, me la imagino feliz, saludandome o nadando entre las nubes, cosa que siempre he soñado hacer. Me recuerdan que ya no está, pero también que está mejor que todos nosotros. Una nube llena de agua, es lo que más se podría asemejar a lo que siento en mi corazón cuando veo detenidamente una pequeña parte de la inmensidad que cubre las ciudades de todo el mundo.

Para mí, ¡un día soleado es una maravilla!, es lo que hace que yo esté feliz. Si el día se encuentra nublado y gris, por un momento me da tristeza porque sé que podría ser diferente, pero después solo le doy gracias a Dios por darme ese regalo que es el cielo, que nos presta las nubes para que las admiremos. Sus formas, su movimiento, la manera en la que el sol las ilumina por encima y resalta sus contornos. En fin, es algo hermoso, que me inspira y hace que un día llegue a ser diferente.