¡Por fin! ¡Ha llegado! (No se ha hecho esperar demasiado).
Ahora es el momento de escribir y tener el blog bien lleno de “cositas” (diminutivo dedicado) interesantes. Estaba temiendo este momento.
Desde que me contaron la idea, ando por el mundo de diferente manera.
Primero, estuve unos días al acecho, buscando insistentemente cosas que ocurrieran a mi alrededor que fueran dignas para de ser puestas como post. Pero nada, a mi alrededor sólo se acumulaba la cotidianidad de siempre.
Segundo, pensé que si podía provocar que pasaran cosas interesantes tendría cosas interesantes que contar. Lo único que conseguí es demostrar una actitud extraña y un comportamiento raro, que no entendían, para nada, las personas con las que trato diariamente. Y cuando quise explicar los porqués, sólo obtuve arqueos de ceja y leves asentimientos de cabeza con la boca ligeramente abierta. (De incomprensión también se vive).
Tercero, me senté a pensar; era muy difícil esto de escribir para un blog. No sé si estoy preparada para ello. (En la Universidad te enseñan muchos conceptos pero por desgracia no nos preparan para la vida).
Por último, y siempre de mano de la casualidad, di con este texto:
“Es mediodía y James Baldwin está caminando con un amigo por las calles del sur de la isla de Maniatan. La luz roja los detiene en una esquina.
-Mira –le dice el amigo señalando el suelo.
Baldwin mira. No ve nada.
-Mira, mira.
Nada. Allí no hay nada que mirar, nada que ver. Un cochino charquito de agua contra el borde de la acera y nada más. Pero el amigo insiste.
-¿Ves? ¿Estás viendo?
Y entonces Baldwin clava la mirada y ve. Ve una mancha de aceite estremeciéndose en el charco. Después, en la mancha de aceite ve el arco iris. Y más adentro , la calle pasa, y la gente pasa por la calle, los náufragos, y los locos y los magos, y el mundo entero pasa, asombroso mundo lleno de mundos que en el mundo fulguran; y así, gracias a un amigo, Baldwin ve, por primera vez en su vida ve.”
E. Galeano. Amores
Ahora ya sé cual debe ser mi punto de partida: cambiar mi mirada.
Post post: Aunque no tengo ni idea de cómo se hace.