Al fin, gracias a Dios, ha terminado esta Liga. Cinco partidos
consecutivos mordiendo el polvo, tres competiciones perdidas en dos
meses., todo un hito en la centenaria historia del Real Madrid..
muchas gracias, Carlos Queiroz, muchas gracias, Floren y Jorge por
dejar escapar a Morientes, Valdo y Eto'o y muchas gracias sobre todo
a vosotros, jugadores que estáis más preocupados de
salir por las noches que de jugar en el campo y compensar de algún
modo vuestras millonarias nóminas.
Menos mal que ya está aquí Camacho, dispuesto a poner disciplina y a recuperar los valores que el madridismo jamás debió perder.
Pero el desastre madridista, aunque muchos no lo crean, no es lo
único que ha ocurrido esta temporada. A destacar la sólida
composición del Valencia, al que ahora le toca recordar que lo
difícil no es llegar, sino mantenerse siempre en puestos de
Champions League. No hay más que ver el (penoso) ejemplo de la Real
Sociedad para recordarlo, y del Celta ya casi que ni hablamos.
El Barcelona, por su parte, ha firmado una segunda vuelta
espectacular... más teniendo en cuenta que con este año
ya van cinco en el que el conjunto azulgrana no gana ningún
trofeo oficial, con un vestuario que recibe más denuncias y
citaciones que copas. El Lustro Blanco del Barcelona será algo
que los madridistas contaremos a nuestros nietos no sin cierto
deleite, máxime si el año que viene Laporta lo fastidia
y de lustro crece a sexenio.
Una buena temporada también de los equipos andaluces,
destacando a ese Sevilla que el año que viene jugará la
UEFA. Y conste que yo soy más bética que sevillista,
pero fuera de Andalucía hay que apoyarlos a todos por igual.
Esta temporada también ha sido la de Morientes, que no sólo
es mi amor platónico de toda la vida, sino también mi
jugador favorito desde que marcara aquél gol en París
que nos granjeara no sólo la Octava Copa de Europa, sino el odio
eterno del Valencia. El Moro ha demostrado lo que vale, y ha
demostrado que se merece un puesto en el Real Madrid y en la
Selección Española. Espero que quiera volver, porque le
necesitamos, y mucho.
Y ya bajando un par de categorías, tengo al Granada CF
clasificado para jugar la liguilla de ascenso. Una liguilla que
también jugará el otro equipo de la capital, el Granada
74. Sólo espero que esta vez la suerte nos acompañe, y ya que hemos pactado con el diablo,
podamos ver al Granada en Segunda B, y muy pronto en Segunda.
Ya sólo queda esperar que el Monaco gane la Copa de Europa. Y a esperar una nueva Liga
No critico que se dedique la mayor parte del espacio de los informativos a la Boda Real, principalmente porque, nos pese o no, es un acontecimiento importante que no se producía en nuestro país desde antes de la II República. A no ser que las cosas cambien mucho de aquí a un par de decenios, Felipe será nuestro próximo rey, nos guste o no. El representante de nuestro país fuera de nuestras fronteras. Por eso es importante que su consorte también sea una persona adecuada, si no queremos que nuestra monarquía se convierta en un cachondeo al más puro estilo inglés.
Ahora bien, una cosa es informar sobre lo trascendente (formación de la novia, lugar de la ceremonia, por dónde va a pasar el cortejo...) y otra cosa es tenernos 10 min. ante la pantalla viendo cómo cuelgan el toldo bajo el que pasarán los invitados si llueve, o escuchando los deseos de los "súbditos". Sinceramente, lo que opine sobre la boda una señora que pasaba por allí proveniente de la panadería me importa poco.
Deseando lo mejor para Su Alteza, que no llueva en Madrid (más que nada por los madrileños que estarán fuera esperando, pobres, ¡paciencia!) y que, por Dios, acabe pronto esta tortura mediática, me voy a estudiar. Si yo sólo había puesto la tele para ver lo del fichaje de Samuel...
Me gusta la lista que nuestro seleccionador Iñaki Sáez ha elaborado para la Eurocopa de Portugal. Sobre todo me gustan la defensa (destacando a Puyol, Helguera y Salgado) y el ataque (por fin este hombre parece decidido a confiar en Morientes...). También me ha gustado el detalle de seguir apostando por Raúl a pesar de la desastrosa temporada que ha cuajado (como casi todos los jugadores del Real Madrid, de hecho). Y es que 38 goles pesan bastante en el expediente de un jugador.
Echo de menos a Mista y Reyes, pero Iñaki sabrá por qué no los ha incluido (al fin y al cabo, él tiene el título de entrenador profesional y yo no :-P ). Por lo demás, nada que objetar. Espero que nuestra selección consiga al fin darnos una alegría. Porque en Corea y Japón se demostró que calidad tenemos, y si vamos motivados, tenemos suerte y no nos cruza ningún Ghandour por medio, podemos llegar muy lejos. O al menos eso espero.
No hay que olvidar lo que pasó hace dos meses, porque algunos parece que ya lo han hecho, en particular ciertos votantes y políticos; una vez teñida de rojo (rojo mas bien pálido) la Moncloa, ya nada importa.
De todo lo que he visto sobre el 11M, sin duda lo mejor ha sido este flash publicado hace tiempo por los de El Rellano. Yo todavía no he sido capaz de verlo sin que se me pongan los pelos de punta.
Y, para terminar, una imagen, obra de El Niño de las pinturas
¿Existe alguien que aún no se haya enterado de la inauguración del Fórum 2004? En tal caso, debe vivir sin tele, sin radio, sin Internet y escondido en el Polo Norte.
Todos mencionan que el llamado Fórum de las culturas (¿?) está situado a menos de 1 km. de un barrio marginal, de una zona que ha sido remodelada. Nadie dice, sin embargo, que tal remodelación no se hubiera llevado a cabo sin la celebración del Fórum. A los dirigentes de la ciudad sólo les importa el dinero, la especulación y los beneficios, y no el bienestar de sus ciudadanos como se nos quiere hacer ver.
Tampoco mencionan el desprecio y el mal gesto que se le hizo al Jefe del Estado, S.M. Juan Carlos I, Rey de España (les guste o no, y hasta nueva orden) al negarse a poner el Himno de España, país organizador del evento (supuestamente, el mal gesto afectaría también al Presidente del Gobierno, pero dudo de que a ZP le molestase, estando sus coleguitas del PSC tras las bambalinas). Tras un largo culebrón en el cuál se vieron implicadas también las banderas oficiales, se llegó a la conclusión de que era un acto académico y cultural y por tanto no merecía que sonara el Himno. Sin embargo, la sola presencia del Jefe de Estado ya es suficiente para que el himno tenga razones para sonar, al igual que se hace con la bandera de España o incluso con las imágenes de los santos (que pasen una Semana Santa aquí y verán como el Himno de España suena puntualmente a la salida y entrada de una figura en su templo).
Lo que desde luego no sale en los titulares de las noticias es que el Fórum 2004 no es más que un negocio especulativo, eficazmente maquillado y armado con una buena campaña de propaganda masiva, destinada a que todos sepamos que es genial, pero nadie tenga ni la más mínima idea de lo que es en realidad. De todas formas, quien quiera comprobarlo por sí mismo, puede gastarse los 21 euros de la entrada + espectáculos adicionales no incluidos + comida (no se puede introducir alimentos en el recinto; no iban a perder ocasión de hacer el negocio también en ese sentido) + viaje y alojamiento. Queda pues bastante claro quién va a salir ganando a costa de este evento cultural, sobre todo cuando observamos la lista de los patrocinadores en webs como ésta
Cuando yo era pequeña, el 3 de Mayo por la tarde mi madre me enfundaba un vestido de gitana, y salíamos los tres de Cruces. Ir de Cruces en aquélla época significaba recorrerse las plazas y lugares más representativos de la ciudad, admirar las diferentes cruces que cada organización instalaba, tomarse un vino o (en mi caso) un refresco mientras miraba como docenas de personas danzaban en los tablaos al ritmo de una serie interminable de conocidas sevillanas.
Para qué nos vamos a engañar, los vestidos, las sevillanas y el folclore andaluz en general no son santo de mi devoción, pero desde luego lo prefiero a la situación actual. Porque actualmente, el Día de la Cruz se ha convertido en una macrofiesta, en otro botellón al estilo de la Fiesta de la Primavera. Ya no importa tanto el admirar el trabajo de las asociaciones de vecinos como el ponerse de cerveza hasta arriba, y ya no se bailan sevillanas, sino la última de Bisbal. Ya no es sólo el 3 de Mayo, sino que la fiesta ocupa todo el fin de semana.
Por muchos esfuerzos que el Ayuntamiento de Granada hace en ese sentido, el sentido original de las Cruces se está perdiendo a pasos agigantados. Éstas cada día son menos originales y menos vistosas, y su número se reduce. Llegará el día en el que se pierdan por completo, y el Día de la Cruz pasará a ser otra fiesta más en el calendario, y quizá alguno de los jóvenes que baile el último tema del artista del momento se pregunte que por qué se llama así.
Entre mis amigos es vox populi que no me llevo bien con mi padre. No voy a entrar en razones, sólo diré que es el tipo de persona al que generalmente desprecio.
Su actitud radical ha propiciado que últimamente el clima en casa sea asfixiante. Mi madre es de Izquierda Unida de toda la vida, y él, en cambio, es un ex-comunista desengañado y renegado que ahora odia todo cuanto huela a izquierda. Cualquier comentario es suficiente para que empiece a despotricar contra el PSOE, contra la SER, contra la totalidad de las cadenas de televisión, contra la libertad de expresión, contra los inmigrantes, contra los homosexuales y, sobre todo, contra mi madre por ser de izquierdas. Y aunque yo sea del PP, me repugna esa actitud, porque ni soy intolerante, ni racista, ni homófoba, ni una fascista paranoica como él.
Hoy estábamos viendo la tele mientras comíamos cuando ha salido la noticia de una pareja de homosexuales agredida por un grupo de skinheads. Su comentario: "eso tenían que hacer con todos los maricones, matarlos". A lo cuál yo (que no tengo la sangre fría suficiente para ignorarle) le he respondido que, fíjate tú, uno de esos maricones a los que según él habría que matar es mi mejor amigo, que a su hija (yo) le dieron más de un puñetazo por defenderle y que puede decir todas las barbaridades que quiera sobre otros temas (hasta he tenido que defender a Zapatero en un par de ocasiones y todo), pero que a los gays y lesbianas ni me los mente porque entonces vamos a acabar muy mal.
Evidentemente, hemos acabado mal. Y en estos momentos sólo siento asco de esa ideología que propugna mi padre, la de matar a todos los que no piensen como él. Porque Hitler, Franco, Mussolini, Stalin y Pinochet decían exactamente lo mismo, aunque lo que pensaran fuera de distinto signo político.
Por lo menos sé que no es culpa suya. Su madre y gran parte de sus hermanos opina igual. A mí me entran arcadas cuando oigo los comentarios jactanciosos acerca de los ligues de mis primos, las chanzas sobre los homosexuales y las preguntas sutiles que intentan adivinar si soy de la buena acera o de la mala.
A nadie de mi familia, sin embargo, se le ocurre decir esas cosas en serio, y menos delante de mí. Esa falta de sensibilidad es exclusiva de mi progenitor.
Y a todo esto, uno de los chavales está ingresado. Lo mejor de todo es que los atacaron porque iban cogidos de la mano. Y a mí se me ha venido a la cabeza que este sábado yo fui durante un buen rato abrazada a Claudia para contar el número de paletos que se daban la vuelta para mirar, simplemente para reírnos un rato al ver sus caras. ¿Qué hubiera pasado si la paliza me la hubieran dado a mí, por creerme lesbiana, algún grupo de intolerantes skins como los que le pegaron al chico de Barcelona? ¿Que hubiera dicho entonces mi padre?
A todos estos trogloditas intolerantes, a todos los catetos que aún postulan la cultura del Medievo, les deberían decir que algún día les puede pasar lo mismo a alguien de su familia. Seguro que se les cortaban la risa, las burlas y las bromitas.
Estábamos ayer comiendo todos juntos cuando Nieves me dio un folleto de una ONG catalana para pedir que Barcelona sea declarada ciudad antitaurina.
Ya estaba a punto de echar la petición al correo, cuando mi madre me advirtió de que llegaba tarde. Efectivamente, entré en la página web de ADDA, y me encontré con una agradable sorpresa.
La verdad es que ni me había enterado (últimamente no tengo tiempo ni de leer periódicos, ni de ver noticias), pero, aunque con retraso, la noticia me alegró el día. Y me llenará de orgullo el día en el que pueda decir lo mismo de mi ciudad; pero, por desgracia, vivo en una de las regiones más toroturadoras de España.
En cualquier caso, gracias al Ayuntamiento de Barcelona por darme la esperanza de que algún día esta salvaje... ¿fiesta? será arrancada de cuajo en nuestro país.
Las normas son algo necesario, pensadas para regular o prevenir, y plasmadas con el objetivo de ser cumplidas. Y generalmente solemos hacerlo, pero, como en todo, hay una (peligrosa) excepción: las normas de tráfico.
Y es que día a día alucino con lo que algunos conductores hacen, poniendo en peligro su propia vida y la de los que tenemos la mala suerte de zambullirnos en el tráfico urbano día a día. Lo que hacen (y lo que no hacen) por comodidad, por negiglencia o simplemente por desinformación.
Cuando estudiaba la normativa me hacía gracia esa regla que impone a los conductores de vehículos dejar pasar a los peatones en un paso señalado para tal fin. Me hacía gracia porque el 90% de los conductores que me he encontrado hasta la fecha no es que no se paren para dejarte pasar, es que en muchos casos aceleran al ver que te acercas al paso de cebra, incluso cuando ya estás dentro. Si tuviera siete vidas, habría gastado una sólo para ver cómo a alguno de estos maníacos del volante lo encarcelaban por atropello. Pero como sólo tengo una, hago lo que todo el mundo: quitarme de enmedio rápidamente, ya sea avanzando o (la mayoría de las veces) retrocediendo.
Pero lo que más que impresiona es que los conductores profesionales, los que se supone que deberían observar con mayor atención las reglas que regulan el tráfico, hacen caso omiso de muchas de ellas por simple comodidad. Y hablo de los conductores de autobuses porque es el medio de transporte que utilizo a diario. Ya estoy harta de ver a los conductores hablando por móvil como si tal cosa, parando el autobús en mitad de la calle para intercambiar impresiones con el conductor del autobús de al lado, y conducir con una mano en el volante y otra en la ventanilla. Cuando llevas mucho tiempo usando el transporte urbano te das cuenta de lo importante que es el que el conductor vaya atento y con ambas manos en el volante, porque en cualquier momento se te puede poner un imprudente (peatón o vehículo) delante, obligándote a frenar bruscamente o desviarte a un lado. Lo sé por experiencia.
Lo mejor es que algunos pasan totalmente de las normas. Ni ponen intermitentes, ni respetan a los peatones, ni los límites de velocidad, ni observan la prioridad. Triste ejemplo lo tenemos en el caso de ese señor al que llaman Farruquito, al que encima sus compañeros de oficio apoyan incondicionalmente ("pobrecito, eso nos puede pasar a todos" a todos no, sólo a los imprudentes). Me gusta, aunque he oído poco sobre ella, la idea del carné por puntos. Cualquier cosa con tal de frenar esta serie de imprudencias en la carretera. Que se lo digan a una de mis tías políticas, a la que un coche arrolló (literalmente) cuando estaba en compañía de una amiga suya, en las inmediaciones de la Facultad de Medicina de Granada, situadas en la acera y esperando para cruzar. A ella la arrastró el coche y perdió parte de una pierna, pero tuvo suerte: su amiga murió. Un imprudente puede destrozar una vida en pocos segundos, y estaría bien que nos concienciáramos de ello y pusiéramos medios para evitarlo a toda costa.
Al Qaeda rompe su tregua con España (¡y en la era ZP!) , y declara que va a convertir este precioso país (que acoge a numerosos musulmanes) en un infierno. Unos cuantos acólitos se inmolan en Leganés. Una bomba en el AVE, que no explota "porque sólo querían que nos diésemos cuenta de la magnitud de su poder". Dos mochilas abandonadas en plena calle provocan el pánico en las procesiones de Granada. Un piso franco en la misma ciudad. La policía busca células durmientes en todos lados. Y los musulmanes que residen aquí se esfuerzan en explicar que no todos tienen por qué ser terroristas por el simple hecho de profesar la religión de Mahoma. Y tienen toda la razón. Lo que no quita que tengamos un poco de psicosis, que no podamos evitar desconfiar y mirar de reojo la mochila que un inocente ciudadano marroquí porta en un autobús. Hay que dominar ese punto de paranoia irracional, sí, pero a veces cuesta.
Mientras, la señora Pilar Bardem y el PSOE convierten el homenaje al GEO fallecido en un acto anti-PP. "Los atentados son el justo castigo por la guerra" Justo castigo. Que se lo digan a esas casi 200 familias, que lo que ha matado a sus seres queridos no es consecuencia del odio irracional, del terrorismo más atroz, de una absurda lucha entre Oriente y Occidente. No. JUSTO CASTIGO. Un claro mensaje a tener el cuenta: el asesino es el PP (desde el secretario general hasta el último votante), y no Al Qaeda o Bin Laden. Ésos simplemente se defendían. Pobrecitos, les atacamos y tuvieron que castigarnos. Pues qué bien.
Por cierto, Alemania también teme por su seguridad, al igual que Francia. Dos naciones que se opusieron a la guerra. ¿Tenemos licencia para calificar lo suyo de injusto, señora Bardem, o también han cometido algún pecado u acto que provocara la justa ira del gran Osama? (¿Prohibir el velo en las escuelas?). Incluso hay quien dice que los atentados del 11-M se planearon antes de la agresión imperialista a Iraq. ¿Cuál sería entonces el agravio que hizo explotar los trenes de la muerte? ¿Defender Perejil?
Pues nada. A partir de ahora los gobiernos de todos los países occidentales, a andarse con pies de plomo, no sea que nos castiguen. A guiarnos por el miedo en lugar de por lo que creemos justo o no. Y ya que en nuestro país ya se acabó la dictadura del PP (menos mal, ahora Almodóvar podrá filmar lo que le la gana como nunca antes había hecho...) y empezó la era del cambio tranquilo, espero que nuestro nuevo presidente se aplique con ganas a la labor de empezar a desmantelar células terroristas en España. Y espero que todos recordemos que terrorista no es sinónimo de árabe, ni marroquí, ni musulmán.
Confío en que Zapatero esté a la altura de las circunstancias y confío en que nosotros también lo estemos. El terrorismo puede ser vencido, pero sólo si dejamos de justificarlo de forma absurda. El odio no atiende a razones, ni hay razón que justifique una muerte, cualquier muerte. Que no se nos olvide, ni siquiera a personajes tan distorsionadores de la realidad como la señora Bardem.
PD: Y a todo esto, yo mañana a Melilla. A ver cómo andan los ánimos en la frontera con Marruecos...
Sharon (parece que) se ha cargado al líder de Hamas. A él le parecerá un derecho. A mí me parece que le ha hecho un flaco favor a su pueblo.
El que dijo que la violencia engendra violencia no podía ser más sabio. Hoy yo mato a tu padre, tú al mío, yo te mato a ti, tu hijo me mata a mí y así podemos seguir hasta que finalmente no quede nadie más a quien matar. La venganza puede ser gratificante al principio, pero con el paso del tiempo lo único que provoca es una espiral de violencia sin fin. Lo que, finalmente, se traduce en más víctimas civiles. Más inocentes. Los que realmente sufren, los que mueren, los que son mutilados y los que pierden a seres queridos.
Yo es que ni sé quiénes son los buenos y los malos del conflicto palestino-israelí, si es que se puede llevar a cabo semejante distinción. Sólo veo dos pueblos sufriendo y un dirigente violento que parece no comprender que la vía pacífica es la única solución posible si no quiere que palestinos e israelíes sigan contando muertos hasta que ya no quede nadie que los pueda contar.
Ahora sólo queda esperar (y temer) la respuesta del otro bando.
Ésta es la viñeta que el diario brasileño O Globo publicaba un día después de los atentados del 11-M, en portada
Representa a Bin Laden vestido de torero, tras haber matado un toro con el mapa del mundo en la piel, mostrando orgulloso la oreja, que corresponde al trozo de España.
Seguro que a todos nos molesta mucho mirarla. Y no es para menos. Nadie, y menos un periódico Príncipe de Asturias de Comunicación del año 86, tiene derecho a insultar públicamente a 200 muertos y 1500 heridos. Ahí estamos todos de acuerdo.
Ahora miremos en nuestro propio ombligo. ¿Cuántas veces nos hemos reído de los atentados del 11 de Septiembre en Nueva York? No directamente (bueno, algunos sí lo habrán hecho), sino indirectamente. ¿Cuántos chistes hemos oído sobre aquél trágico suceso? ¿A cuántos "Bin Laden" hemos encontrado en los Carnavales? Se me viene ahora a la cabeza el escándalo ocurrido hace 2 ó 3 años en el Salón del Manga de Granada, cuando en una entrega de premios se organizó un "espectáculo" que incluía actores porno disfrazados de talibanes ejerciendo su "oficio" con mujeres vestidas con burka, y una maqueta de las Torres Gemelas contra la cuál se lanzaron avioncitos que las hicieron explotar. ¿Cómo nos sentaría el que los americanos hicieran explotar trenecitos para divertirse a costa de las víctimas de Madrid?
Espero que todo esto al menos nos sirva para concienciarnos de la poca vergüenza y el poco respeto que mostramos a veces. Nos duele que se metan con nuestras 200 víctimas, pero no nos dolió en su momento meternos con las 3000 víctimas de otros, porque ellos, claro, son americanos, y se merecen lo que les pase.
Pues no, no somos nadie para decir quién merece la muerte y quién no. Y menos para reírnos de 200, o de 3000 familias destrozadas, o de dos países (Estados Unidos y España) conmocionados por un suceso que quedará marcado en su historia como la peor tragedia jamás vivida.
No he hablado de él, porque él es inevitable. Es perenne. Es el Fraga andaluz. Un presidente eterno, que lleva sentado a la presidencia más tiempo del que yo pueda recordar.
Poco se puede decir de él. Parte de nuestro atraso se lo debemos, y parte de nuestro adelanto también. Gracias a su gestión los sueldos son más bajos en según qué sectores. Pero, fijaos, ahí sigue, año tras año, legislación tras legislación. Ya ni nos imaginamos la vida sin su presencia, que está ligada a nuestra tierra, como los colores verdiblancos de nuestra bandera, nuestro acento o el Real Betis Balompié. Supongo que por eso lo votan.
Por eso ni siquiera le había mencionado, ni siquiera me había acordado de él, ni siquiera me había planteado la posibilidad de que ganara alguien más que no fuera él. Porque, evidentemente, ha vuelto a ganar. De calle. Por eso he decidido dedicarle un mensaje, a pesar de que, lógicamente, yo he votado a la ordinaria de Teófila.
Manolo, va por ti. Y a ver si esta es tu última legislatura, quillo, que te haces más pesao que los de Canal Sur con los carnavales.
No es por nada, pero los dos manueles van camino de sobrevivirnos a todos en el poder.
José Luis Rodríguez Zapatero, Zetapé para abreviar, ha hecho realidad sus sueños más húmedos y presumiblemente será el próximo presidente de España.
Enhorabuena a todos los izquierdistas, zapadictos o simplemente descontentos con el gobierno del PP. Habéis conseguido lo que parecía imposible hasta hace apenas dos semanas. En parte, con la ayuda de los propios populares.(en especial de cierto ministro mentiroso y cierto ex-presidente belicoso).
En parte, si os soy sincera, me alegro de que el PP no haya ganado. Cuatro años de oposición serán una buena oportunidad para terminar de pulir a nuestro candidato, o para elegir a uno nuevo si tercia la ocasión. Pero no sólo eso. Espero que en cuatro años los dirigentes del Partido Popular abran los ojos y valoren. Espero que se den cuenta de en qué se han equivocado, y analicen por qué han perdido.
El pueblo ha hablado. No voy a meterme en camisa de once varas, pero sí voy a decir qué es lo que comparto yo con ese pueblo que hoy ha hablado votando a Zetapé: no me gusta que se vaya a una guerra cuando yo no quiero, no me gusta que me mientan (¿eh, Acebes?) y no me gusta que se le quite importancia a una catástrofe medioambiental (Expediente Hilitos de Plastilina). Tres actitudes del PP que no me han gustado nada, y que espero que no se vuelvan a repetir, ni en el Partido Popular ni en ningún otro partido político, por el bien de todos.
Al nuevo presidente le deseo que le vayan las cosas muy bien, porque si no, le vamos a dar caña desde la oposición, y mucho (oh, sí). Lo que sí espero es que sepa avanzar en materia de lucha contra el terrorismo. A pesar de que estoy totalmente en contra del diálogo con los asesinos de ETA, comprendo que hay otras opiniones diferentes a la mía, y puede ser bueno tener un gobierno algo más conciliador (o eso espero...). Y en materia internacional, tengo la esperanza de que Zetapé, por el bien de España, tenga temple y acabe con nuestro servilismo a Mr. Bush.
Pues nada. A disfrutar, y dentro de cuatro años nos vemos las caras.
PD: Pero que quiten esas banderas republicanas, por favor...
12 de Marzo. Mi jornada reivindicativa empieza a las 6:50 en el Centro Comercial Neptuno, punto donde me reúno con Aarón. Nos encaminamos hacia la salida de la manifestación (Paseo del Salón) e, incluso antes de llegar, ya nos topamos con una gran marea de gente que nos dificulta llegar hasta el lugar donde hemos quedado con los demás.
Una vez reunidos, nos vamos colocando hasta ponernos hacia la mitad de la manifestación, buscando otros grupos de nuestra edad a los que acoplarnos. Empieza la larga marcha, y pronto queda claro que, en general, somos nosotros, los jóvenes, los que vamos a gritar hasta desgañitarnos. Los más mayores nos miran en silencio... quizá ellos ya se han cansado, tras toda una vida de gritar.
Recorremos lentamente algunas de las calles que conforman la columna vertebral de Granada. Salón, Carrera de la Virgen, Fuente de las Batallas, Reyes Católicos, Gran Vía... Cuando llegamos a la Subdelegación del Gobierno, lugar donde supuestamente acababa la manifestación, la cabeza hace ya tiempo que se ha disuelto. Ya sólo quedamos los más jóvenes, que seguimos un poco más hasta los Jardines del Triunfo, donde hacemos una sentada, y dos minutos de silencio. Impresiona, y mucho, sentarte en el asfalto de una de las calles con más tráfico de Granada, por donde a diario circulan miles de coches y casi todas las líneas de autobuses urbanos. Finalmente, a eso de las diez, nos disolvemos, cuando ya la policía empieza a restablecer la circulación.
Si mi experiencia en las manifestaciones contra la guerra de Iraq de hace un año me dejaron un regusto amargo, pude decir que ayer acabé extrañamente feliz. Feliz dentro de la infelicidad que supone el recuerdo de lo ocurrido el 11-M, se entiende, y por varias razones. Suelo decir que España es el único país en el que está mal visto decir que amas tu patria. Ayer mis queridos conciudadanos (sobre todo la juventud) me demostraron que ésa es una situación que empieza a cambiar. Había cientos, quizá miles, de banderas de España sin o con sus correspondientes crespones negros. Lanzamos varios vivas a nuestro país. Y nadie nos llamó fachas.
Se agradeció también que nadie intentara politizar la manifestación. Había algunos ciudadanos que llevaban sus pancartas, y algunas aludían a ETA, otras a Al Qaeda, algunas al Sr. Pérez Díez Carod-Rovira y otras a Ibarretxe. Pero eran casos aislados y la mayoría, sin embargo, se limitaban a un sólo lema: un no rotundo al terrorismo, sea de quien sea. Nosotros, ante la duda de quién había sido, y por temor a equivocarnos, acuñamos un lema: "ETA y Al Qaeda, cobardes de primera". Y todos contentos.
En cuanto a símbolos, como ya he dicho, abundaba la bandera española. También había una bandera republicana y otra gay (¿?). Especial mención a la bandera de México que ondeaban, lógicamente, unos ciudadanos oriundos de aquél país, a los que vitoreamos al grito de "¡Viva México!". Los españoles agradecemos apoyos sinceros como el de Vicente Fox y su gente, y no las lágrimas de cocodrilo de Bush (aunque siempre se agradecen las de la gente de Bush).
Finalmente, fuimos más de 250000 granadinos los que nos manifestamos por la paz, con el vívido recuerdo de Luis Portero en la memoria. Las consignas más gritadas: "Madrid, amigo, Granada está contigo", "España, unida, jamás será vencida" y, cómo no, "Íbamos todos, en ese tren".
Lo mejor fue, sin duda, cuando llegué a mi casa y vi las imágenes de otras manifestaciones en la televisión. Se me hizo un nudo en la garganta al ver los dos millones de personas que se manifestaron en Madrid, pero más al ver a la multitud barcelonesa que, haciendo gala de una solidaridad inmensa, declaraban a voz en grito que ése día todos eran madrileños. Todas las ciudades se llenaron, y todas con un mismo lema. Sin palabras.
¡¡ESPAÑA, UNIDA, JAMÁS SERÁ VENCIDA!!
Después de lo que ha pasado, todo el mundo habla de las soluciones al problema del terrorismo. Evidentemente, lo primero en lo que todos (o casi todos) pensamos al ver el atentado fue en la Ley del Talión (ojo por ojo...), la pena de muerte o (como decía mi padre en uno de sus momentos de furia) en ejecutar a cinco etarras presos por cada persona inocente que maten.
Bien, ya sé que para mí es muy fácil decir esto (en realidad no) pero ésa no es la solución. Por favor, recapacitemos. ¿De qué serviría responder de manera violenta a cada atentado que hagan? Lo único que eso haría sería provocar otra reacción, porque a ellos no les importa morir matando, y al final morirían muchísimos más inocentes. Entraríamos en una espiral de violencia, como la que tienen los israelíes y palestinos, y al final todos acabaríamos implicados, ninguna de las partes podría parar la violencia, y entonces sí que estaríamos acabados. La violencia nunca puede justificarse, nunca, ni siquiera contra este tipo de seres.
Otros apuestan por el diálogo (los más conciliadores o los que tienen más estómago). Ya he dicho abajo que no se puede dialogar con alguien que te está amenazando continuamente, que te tiene en el punto de mira con el dedo en el gatillo. Que los terroristas, sean quiénes sean, dejen las armas, y entonces se dialogará, a ver lo que realmente quiere la mayoría de ciudadanos de Euskadi (y no sólo lo que quieren los terroristas). ¿Que quieren independencia? Pues vale. ¿Que quieren más libertades? Siempre que no perjudiquen al resto de Comunidades Autónomas, por mí que les den lo que quieran. Me trae sin cuidado, eso a quiénes les debe de importar es a ellos.
De momento lo único que podemos hacer es esperar como agua de mayo las noticias de que la policía o la guardia civil ha desbaratado otro comando, detenido otro atentado a tiempo o atrapado otro etarra. Eso y ayudar a las víctimas del terrorismo, estar unidos y salir a la calle a manifestar nuestra indignación. TODO menos la violencia.
En fin, me voy. Buen fin de semana, y votad el domingo. Votad a Zetapé, a Marianín, a Llamazares o a quien os de la gana (total, si al final todos acabarán metiendo la pata más tarde o más temprano, es inevitable). Pero votad, que se
Por si no tuviéramos bastante con el horror de los atentados, ahora no sabemos ni siquiera quién los ha cometido. Genial.
Hay tres posibilidades:
1) Que sea ETA. Por lo que todos ya sabemos.
2) Que sea Al Qaeda. Por haber metido las narices en Iraq.
3) Que sea Al Qaeda con apoyo logístico de ETA. Porque Dios los cría, y ellos se juntan.
En el primer caso, ya lo dije ayer. Unos aprietan el gatillo, pero hay otros que les compran la pistola y otros que les dan razones para hacerlo. El caso más claro es el del del asesino de Otegui y sus chicos. No digo que Ibarrexte y Arzalluz quieran que ETA cometa masacres, pero podrían hacer más de lo que hacen por evitarlo. Tampoco digo que Maragall (pobre hombre) quisiera que ocurriese lo que ocurrió, pero debería haberse mostrado más contundente cuando se descubrió lo del Sr. Pérez Carod-Rovira (porque sí, soy de las que piensan que hubo pacto, y no, no me lo ha susurrado Aznar al oído, lo he pensado yo solita empleando la lógica). Lo que digo es que el nacionalismo exacerbado acaba desembocando en odio, y el odio produce masacres como la de ayer (o atentados o asesinatos por tiro en la nuca, en su defecto). Está muy bien preocuparse por la tierra de uno, pero sin insultar a los demás (esto incluye no quemar banderas de España, ni decir que en Andalucía, Murcia y Extremadura vivimos de Madrid y/o Barcelona, gracias) y sin difundir falacias históricas que hacen a tantos exaltados creerse superiores y diferentes a los demás. Porque la libertad de uno empieza donde termina las demás, y ninguna razón, ni siquiera la independencia de una nación (¿?) justifica la muerte de un sólo hombre. O al menos eso opino yo.
En el segundo caso... Bueno, el año pasado discutía con mis compañeros de clase acerca de la posible implicación de España en la guerra. Y coincidíamos en que eso traeria cola, y nos pondría en el punto de mira de Al Qaeda. Si se confirma que han sido los terroristas islámicos, ojalá que al menos sirva al futuro gobierno que se formará a partir del domingo de que implicarse en una guerra nunca es bueno, y menos si vas en contra de toda la población de tu país. No a la guerra, ahora y nunca, y ya es hora de exigir responsabilidades al señor Ansar.
En el tercer caso... bueno, la verdad es que prefiero ni pensarlo.
¿Repercusiones políticas? Creo que en el primer caso perjudicaría al PSOE, y en el segundo, claramente, al PP (aunque claro, siempre estará quien le eche siempre la culpa siempre al PSOE, o siempre al PP, pase lo que pase...).
No sé, no hay que olvidar que para el PP el grupo terrorista ETA no era tal (sino un grupo de reivindicación, o algo parecido) hace unos cuantos años, y tampoco hay que olvidar que el PSOE también nos metió en otra guerra injusta (y que había misiles apuntando a España). Aquí no hay ni malos ni buenos, todos cometen errores y meten la gamba.
Por eso he decidido olvidar el atentado a la hora de decidir a quién voy a votar. A pesar de que ayer recibí (y reenvié) varios correos electrónicos que pedían que actuásemos en consecuencia, esta mañana me he convencido de que no hay que politizar los atentados. Al contrario, en estos momentos deberíamos unirnos todos, sin importar la ideología, con un objetivo común: la paz. Que, al fin y al cabo, es lo que más nos importa a todos.
Sonaban los móviles de los muertos, diez minutos después del atentado. Sus familiares les llamaban esperando oír la confirmación de que estaban bien, de que estaban vivos... pero ellos ya no podían dársela.
Perdonadme semejante introducción, pero es la historia que más me ha impactado en lo que llevo de día. Hoy es día de reflexión y de movilización. Hoy es un día de crespones negros y banderas a media asta.
En la Facultad nos han recordado la labor del historiador: quien conoce sus orígenes comprende a los demás, quien conoce su historia no cree en falacias, y quien no acepta las mentiras no comete actos como el de ayer. Así de simple.
Muchos han comentado ya cierto paralelismo entre el 11-S y el 11-M. La sensación de incredulidad que me invadió mientras veía en la televisión las imágenes de los trenes reventados era la misma que la que tenía hace dos años observando el humo que escapaba por la parte superior de las Torres Gemelas. El horror también era idéntico, al igual que el dolor. A lo largo de ambas jornadas tuve el inconsciente pensamiento de estar viviendo un día que recordaría durante toda mi vida de cabo a rabo, que daría lugar a algunas de ésas preguntas típicas que de vez en cuándo nos hacemos: ¿Dónde estabas cuando cayeron las Torres Gemelas? ¿Qué hacías cuando te enteraste del atentado de Madrid?.
Pero, sobre todo, lo que predomina es la sensación de irrealidad. No parece real, esto no está pasando. Nadie es capaz de semejante atrocidad. Ojalá fuera un mal sueño, pero, lamentablemente, no lo es.
Hoy es el día de expresar todo lo que sentimos ayer. He hablado con mucha gente que no piensa ir a las manifestaciones porque dicen que no sirven para nada. Yo opino que sirven para algo muy importante: para ayudarnos a nosotros mismos. Yo, por lo menos, necesito estar con gente que esté tan indignada como yo, necesito llorar con los que lloran, necesito quedarme afónica para expresar lo que siento. El mundo entero estará pendiente de nosotros a las siete de la tarde: demostremos que estamos dispuestos a combatir el terrorismo de la única forma que podemos, es decir, manifestando nuestro dolor y nuestra rabia. La muerte de Miguel Ángel Blanco es una fecha clave en la historia del terrorismo español, un punto de inflexión. ¿Por qué? Porque la gente salió a la calle, miles de vascos sin miedo, y miles de no vascos que les apoyaron.
¿Quién sabe si hoy no podemos marcar nosotros otro punto de inflexión, otra fecha memorable?
Salgamos a la calle. Que hoy a las 19:00 toda España se concentre en las calles y plazas. Es lo menos que podemos hacer para honrar la memoria de todos los que, ayer, murieron sin saber por qué.
Pues eso. Cerrado hasta mañana, tras ése mensaje que no he podido evitar (y en el que ya no se puede comentar).
Respetemos el dolor de las víctimas, que somos todos.
EDITADO A LAS 16:30
186 muertos, 90 de ellos menores.
Llego a clase y lo primero que me encuentro son las imágenes del atentado de Madrid en la tele... ni siquiera me quedo a verlas, corro disparada al ordenador a ver si la gente de Madrid que conozco está bien.
En estos momentos sólo se te ocurre pensar en la gente que conoces... en que mis padres estuvieron en Madrid hace poco más de dos semanas...
¿Estará contento el señor Cabrón Rovira, perdón, José Luis Pérez Carod-Rovira? ¿Estarán contentos Arzalluz, Ibarretxe y compañía? ¿Brindarán hoy los presos de ETA con champán, o se conformarán con vino francés?
Ahora saldrán todos los independentistas/victimistas vascos, catalanes y demás, diciendo que no es su culpa y bla bla bla. Que se vayan TODOS a tomar por saco, que se metan sus hipócritas palabras por donde les quepa, que hagan referéndum si quieren (¿o quizá no lo hacen porque saben que la mayoría de vascos y catalanes NO quieren ser independientes?), que se aíslen todos en tres o cuatro aldeas perdidas por los Pirineos, se encierren con una muralla y conserven así intacta sus identidades patrias...
PERO A LOS DEMÁS QUE NOS DEJEN VIVIR EN PAZ.
PD: Tanta autodeterminación, tanto derecho a conservar la identidad, tanto lloriqueo victimista vasco-catalán, tanto "no nos van a imponer nada desde Madrid" y tanta leche... es un juego muy bonito votar a ERC o al PNV, porque así se cree uno más guay, creerse superior por tener RH negativo (por cierto, yo lo tengo y soy andaluza) o verse a sí mismo como heredero de los abigarrados pueblos vascones o Wifredo el Velloso... Tanto fomentar el desprecio al resto de españoles desde la Generalidad y el gobierno vasco... Y al final el juego independentista, al final medio centener de personas mueren porque otros quieren vivir mejor de lo que ya viven, ¡¡Y AL FINAL ÉSTE, Y NO OTRO, ES EL RESULTADO!!
PD2: Al principio del post iban 50, ahora ya van 100 más. ¿Irá Maragall a contar los cadáveres?
Hoy me he enterado de una de esas sentencias judiciales de las que sólo puedes reírte por no llorar. Resulta que a una madre, cántabra y divorciada, le retiran la custodia de sus dos hijos por trasladarse a Lérida. Según el lumbreras del magistrado, el gran choque que produciría enfrentar las costumbres y culturas catalanas y cántabras (separadas por un enorme abismo, sin lugar a dudas) y, sobre todo, la gran barrera idiomática del catalán (que, todos lo sabemos, es un idioma absolutamente incomprensible e imposible de aprender si uno no es de allí...) podría provocar traumas a los niños. Qué gran labor de previsión la de este magistrado, ¿verdad?
La cosa podría quedar ahí, e incluso nos podríamos reír de la sentencia si no fuera porque hay dos niños menores implicados y perjudicados por ella. Pero no, no queda ahí, porque hay más, un pequeño detalle insignificante: la susodicha madre "comparte su vida con otra mujer" (lenguaje televisivo) lo que, traducido al castellano vulgar, quiere decir que es lesbiana y vive con su pareja.
No sé si la condición sexual de la madre habrá tenido algo que ver en la decisión del juez, pero una no puede evitar sospechar, sobre todo teniendo en cuenta que llevamos algo más de un mes siendo bombardeados por noticias acerca de la adopción de niños por parte de parejas homosexuales, bodas entre personas del mismo sexo, y, por supuesto, las opiniones que algunas asociaciones retrógradas y ciertos sectores de la Iglesia católica tienen al respecto. De hecho, hace tiempo que quería comentar el tema, y esta noticia me ha dado pie a ello.
"Para el desarrollo normal de un niño, éste necesita a un padre y a una madre, una figura masculina y otra femenina" decía el otro día un indignado señor en la tele. ¿Seguro?
No hace falta irse muy lejos para buscar un modelo de familia que no encaje en el prototipo "normal" (entiendiendo por normal aquello que es usual, común y mayoritario). ¿Quién no conoce a un hijo de padres divorciados que haya crecido exclusivamente con su padre o su madre? ¿Tienen que ser niños psicológicamente inestables por necesidad?
Y los hijos que sí tienen padre y madre, viven con ellos y tienen que ver cómo día a día el primero somete a maltratos y vejaciones a la segunda. ¿Van a tener un desarrollo normal, a pesar de entrar en lo que se denomina "modelo de familia"?
En cuanto al texto de la sentencia... ¿alguien me explica cuál es la diferencia sustancial entre cántabros y catalanes? ¿Podrían traumatizar a los niños los colores de la senyera? ¿Por qué si yo, que vivo en Granada, entiendo perfectamente a un catalán cuando habla, un niño no va a poder aprender el idioma viviendo allí? Los argumentos esgrimidos por el juez son tan ridículos que al final he acabado convenciéndome de que lo que ha pesado más en la sentencia ha sido la homosexualidad de la madre, y no el verdadero bienestar de los niños.
Lo cual me lleva a plantearme otra cosa: si el juez se preocupa tanto por el trauma que puedan sufrir los chavales al chocar con un idioma "extraño" al suyo... ¿por qué no está tan sensibilizado ante el trauma que supone para cualquier niño crecer sin su madre, o, en su defecto, lejos de la persona que lo ha cuidado desde que nació?
Más de uno dice, también, que la prohibición de que los homosexuales adopten niños se debe, sobre todo, "al trauma que supondría para el niño darse cuenta de que sus padres no son como los de sus amigos y bla bla bla". Pues vale. Me remito, nuevamente, a los hijos de los divorciados, ¿deberían quitarles sus hijos a los padres que se divorcian y entregárselos a una familia "normal"? Al fin y al cabo, el chiquillo podría traumatizarse al ver que su familia no es como la de sus amigos, ¿no? Y, de hecho, la mayoría se lo preguntan en algún momento de su vida, pero acaban comprendiendo que no por ello su familia es peor que las demás; simplemente, es diferente.
En mi (humilde, inexperta y ociosa) opinión, lo que deberíamos hacer es cambiar la mentalidad. Si para proteger a un chico prohibimos que dos lesbianas lo adopten, sólo lo estamos protegiendo de nuestros propios prejuicios. No sólo eso, sino que estamos coartando la libertad de una pareja, que ya debido a su propia naturaleza tiene difícil lo de tener descendencia.
La solución más satisfactoria, aunque no más fácil, pasa por eliminar ésos prejuicios. Lo que un niño necesita para crecer feliz es amor. Sólo eso. Si dos hombres, un hombre y una mujer, o una mujer sola son capaces de dárselo, tendrá un desarrollo psicológico estable. ¿Que en algún momento se sentirá diferente? Cierto, y tendrá que superarlo, como cada cuál supera sus propios traumas. Lo que no se puede hacer es llevar esa diferencia a juicio y presentarla como una barrera insalvable; en últimas instancias, el perjudicado será el propio niño, al que la tele le repetirá, machaconamente, que sus padres no son "normales".
Y es que hay jueces que parece que sólo quieren hacer más difíciles las circunstancias de quienes ya de por sí lo tienen muy difícil.
Estoy harta de las habituales campañas anti-piratería, de las imágenes de tractores pasando por encima de CD's piratas, y, sobre todo, de las declaraciones de miembros de la SGAE diciendo que nos vamos a cargar la industria de la música.
Porque aquí todos sabemos perfectamente que la piratería, dentro del mundo de la música, no afecta al bolsillo de los cantautores, sino al de las discográficas.
Nos quieren hacer creer estos señores que nosotros tenemos la culpa. Nos quieren hacer creer que nosotros somos los piratas cuando lo cierto es que ellos se embolsan casi la totalidad del precio de los CD's que hacen otros.
Es increíble que un producto cuyo coste real son menos de 1'20 euros se comercialice a 15 ó 20. Y lo más increíble es que el tío que canta las canciones se lleve sólo 60 pesetas. Pero sucede, y esta gente se llena el bolsillo a costa del sufrido consumidor. O se los llenaba, hasta que se popularizó Internet y los programas peer to peer, y apareció una cosita que se llama Top Manta.
¿ Por qué tiene tanto éxito el Top Manta? Pues porque hace lo que las discográficas tenían que hacer: vender los CDs sacando un beneficio ajustado.
Lo mejor de todo es la hipocresía que destila esta gente. En primer lugar, porque apostaría a que muchos cantantes como, por ejemplo, este señor, están deseando ver sus discos en las mantas de los vendedores ambulantes.
¿Por qué? Muy sencillo. Si el disco de Fulano de Copas vale 20 euros y se lo compran 1000 personas, sólo le conocen esas 1000 que serán las que irán a su concierto (que es REALMENTE de lo que los cantantes sacan beneficio). Pero si el disco de Fulano de Copas se vende en el Top Manta a 3 euros, se lo comprará 1 millón de personas que irá a sus conciertos. El beneficio obtenido por los conciertos sobrecompensará lo perdido por los CDs pirateados, eso os lo aseguro.
Otra cosa que tiene mucha gracia son los sistemas anti-copia que traen los CDs instalados. Caso real: X se compra el CD de Rosa (el primero) lo mete en su ordenador para escucharlo, y se le estropea el susodicho aparato. Tras reclamar, le dicen que ese sistema es necesario para que el disco no se piratee, por tanto, que se fastidie (hablando en plata).
Esa misma tarde, X pasea por el centro y ve el disco de Rosa, perfectamente pirateado, en todos los Top Manta de la ciudad.
Es de suponer que, tras esta experiencia, X no sólo se acordará de la familia y allegados de la industria, la SGAE y acólitos de los mismos, sino que no volverá a comprar un CD en su vida. Y con razón, pues, ya que pago 3000 de las antiguas pesetas por una música que vale muchísimo menos (me refiero al soporte, claro) tengo derecho a escucharla en el ordenador, en el coche o en la tostadora de pan si me da la real gana, sin que esos canallas tengan la caradura de instalar sistemas que estropeen MIS aparatos electrónicos.
Pero sin duda lo que más nos ha gustado es el canon impuesto a los CD's y DVD's vírgenes, que supone la quintaesencia en el arte de llenarse los bolsillos a costa del trabajo de otros. Porque YO, ahora mismo, le estoy pagando a la SGAE por grabar en CDs que YO he comprado religiosamente, unos textos que YO misma he escrito, o unos programas que YO he creado. Por tanto, los señores LADRONES de la industria se están beneficiando a costa de MÍ TRABAJO.
Pensadlo, ¿quiénes son los piratas?
Está de moda ir de lesbiana. Al menos, en el mundo de la música.
Aunque nadie lo quiera reconocer, parece que las t.A.T.u.
(aka "las dos rusas esas que van de lesbianas") han creado
una nueva moda: la del morbo lésbico para regocijo del público
masculino y parte del femenino.
Primero la gala en MTV con el espectáculo de Madonna
"agradeciéndoles" (¡y de qué manera!) su apoyo
a Britney Spears y Christina Aguilera, que,
por cierto, ya me diréis a santo de qué venía, pero que
a buen seguro consiguió que la que parecía que iba a ser una gala
anual más se imprimiera de forma perenne en la memoria de los asistentes
y del público en general.
Luego el famoso videoclip de la Spears, Me against the music (no haré
la broma fácil) en el que ella y Madonna mantienen la tensión
sexual hasta llegar a un semi-beso final, interrumpido por la desaparición
por arte de magia de la reina del pop. El vídeo en sí está
bien, pero tampoco sé qué pinta el momento lésbico en todo
eso (tendré que leer la letra de la canción, pero por el título
no creo que tenga mucha relación).
Y lo que más curioso me parece es que toda esa parafernalia está
montada para disfrute de morbosos heterosexuales. Que habrá miles de
hombres (y mujeres) en el mundo que se hayan hecho alegrías (expresión
© Alfonso) rebobinando una y otra vez las imágenes de Madonna y
Britney, pero no hay ninguna pareja de homosexuales (hombres o mujeres) que
puedan mostrar su amor libremente por la calle sin que les miren y les señalen
con el dedo. Nos parece muy bien que Britney y Madonna se besen, pero no que
lo hagan la vecina del cuarto y la del tercero, al menos no sin que soltemos
la risilla y las señalemos.
Una nueva señal de la sociedad hipócrita en la que vivimos.