Hoy te voy a contar una anécdota informática, que, aunque no lo
parezca, es 100% verídica. Ocurrió el pasado enero, un día
que volvía yo del instituto hablando con una amiga a la que llamaremos
X.
X: ¿Qué te han regalado los Reyes?
YO: Pues... una colonia de hombre (...)... un bolso de viaje (etc etc etc).
Ah, y un reproductor de mp3.
X: ¡Un emepetrés! ¿Me lo dejas?
Y: ... Sí, claro, pero es de mini-disc...
X: Da igual, si yo lo que quiero es instalarlo en mi ordenador...
Y: .... (imaginándome a mi amiga embutiendo el aparato en una de las
ranuras del ordenador) ¡¿CÓMO?!
X: Sí, es que me han dicho que con el emepetrés puedo oír
discos sin tenerlos metidos en el ordenador.
Y: Sí, ya... Pero para eso lo que necesitas es un reproductor mp3 y un
programa que te pase los discos a archivos mp3...
X: Pero... ¿qué es el mp3?
Y: un formato de archivo.
X: ¡¿?!
Y: como el formato word para los textos, el BMP para las imágenes...
X: ...
Y: Mira, te grabo un CD con todo lo necesario y te lo traigo un día de
estos... te meto unas instrucciones también.
X: Pero que sean fáciles de seguir... que soy un poco torpe.
Y: Ya (¿me lo juras o me lo dices? ^_^U)
Total, le grabé un disco con todo lo necesario, y le hice unas instrucciones
(ya estoy acostumbrada a tratar con torpecillos informáticos, soy amiga
de Nieves ^^U). Al día siguiente, se lo di. Era IMPOSIBLE que tuviera
algún problema...
Y, sin embargo, lo tuvo.
X: Tía... que no me reconoce las canciones del disco.
Y: ¿Y eso?
X: No sé...
Y: ¿Le das a refresh y tal..?
X: Sí, pero nada...
Y: Qué raro...
Quedamos en que un día iría a su casa a ver qué pasaba.
Pero no hizo falta. Otro día me vino, contentísima...
X: ¡Tía, que ya lo he solucionado!
Y: ¿Sí?
X: Lo consiguió mi hermano ayer, que entiende más de informática...
Y: (intrigada) ¿Y qué es lo que pasaba?
X: Pues que resulta que para que el programa me pasase las canciones al ordenador...
había que meter el disco dentro del CD-ROM...
Y: Pero con el disco en su funda, ¡¿Cómo pretendías
que el ordenador convirtiese las canciones?! ¡¿POR TELEPATÍA?!
X: Ya te dije que soy torpe ^_^U
Y: ¬¬U
Lo confieso... aún me estoy recuperando...
El otro día, al salir de la iglesia, topamos con tres nenas del Opus
Dei. Al parecer, llevan ya bastante tiempo tras Nix.
Primero se acercó una, y después llegaron las otras dos. Eran seres
clónicos, la misma ropa, la misma expresión, la misma sonrisa asquerosamente
hipócrita... La rodearon como una manada de leonas que acorrala a su presa,
ignorando totalmente a los que estábamos con ella. Les faltó enseñar
los colmillos, la verdad.
Tras las preguntas de rigor, le preguntaron que cuándo iba a ir a verlas.
Tras una típica respuesta de cortesía por parte de mi amiga que,
en realidad, vino a significar algo así como "espérate
sentada, guapa", se miraron las unas a las otras y decidieron que algún
día subirían ellas a visitarla...
Más tarde, Nix me dijo que, si querían verla, ya les mandaría
ella una foto...
Hoy, al recordar el incidente, he decidido buscar información de la
Obra en Internet. En concreto esta
página titulada "Gracias a Dios, ¡nos fuimos!"
me ha resultado muy interesante. Contiene un testimonio de una chica ex-numeraria,
que entró a formar parte del Opus a los 15 años, y que
resulta francamente estremecedor.
Un día, en la parada del autobús, me encontré a una ex-compañera
del instituto. Fuimos hablando durante el viaje, y en un momento dado me comentó
que ella y otra compañera habían tenido que visitar varias tiendas
de cómic y manga, para comprarle un regalo a no sé quién...
- Y en todas, todas las tiendas, ocurrió algo muy curioso...
- ... cuando entrabas se te quedaban mirando como a un bicho raro -me adelanté.
- ¡Pues sí! Se quedaban mirando como diciendo... "¡Oh,
mujeres!"
- Suele pasar ^_^
Me abstuve de comentarle, para no sorprenderla más, los efectos que
podría haber ocasionado sobre la presión sanguínea del
pobre dependiente el que se acercara con cara de enterada y le preguntara por
el último número de Saint Seiya, Angel Sanctuary,
o por un tomo cualquiera de Akira...
Nieves y yo, un día cualquiera, en cierta hamburguesería
(que no es McDonald's, ni Burguer King...
Nieves me pinta un corazón con Ketchup en la hamburguesa.
Pasa la camarera (mirada de reojo).
(más tarde)
Yo: (tono de broma) me tienes abandonada...
Nieves: (tono de falsa indignación) ¡¿Yo?! ¡Pero si
llevo un montón de tiempo saliendo contigo!
Pasa la camarera (mirada de reojo).
(más tarde)
Yo: dice mi padre que no piensa ponerme una cama-nido... lo cual quiere decir
que si os venís a dormir, pongamos por ejemplo, Alfonsito, AA y tú,
tendrías que dormir contigo...
Nieves: bueno, a mí no me importaría acostarme contigo...
Pasa la camarera (mirada de reojo).
(más tarde)
Nieves: Javi es malo...
Yo: no...
Nieves: que sí...
Yo: no y te lo puedo demostrar...
Nieves: venga, demuestralo...
Yo: Cuando estemos fuera de aquí te lo demuestro.
Pasa la camarera (mirada frontal, directa y guasona). Nieves se echa a reír.
Otro día cualquiera, Nieves y yo, en el mismo sitio...
Nieves: ¿cuándo te vas a examinar del teórico?
Yo: Cuando tú te examines...
Nieves: Vale, lo haremos juntas.
Pasa la camarera.
Ayer, en el mismo sitio, Nieves, Javi, yo y unos cuantos más...
Nieves pegándose el lote con Javi...
Yo: ¿por qué no pasa ahora la camarera?
Patri: es que vosotras dos tenéis el don de la oportunidad...