Estoy sentada en una cafetería de la estación, tomándome un descafeinado de sobre, aún me queda media hora. No soporto perder el tren. Llegar corriendo para ver como se va sin ti, es como si se te escapara la vida, pierdes una hora maravillosa que podrías haber aprovechado de mejor forma.
Ya se que una hora no es nada, pero si sumo todas las horas perdidas de mi vida, daría una cantidad importante y se me ponen los pelos de punta. Todas esas mañanas que me quedé en la cama, todas las veces que no apagué la tele o el ordenador cuando debía hacerlo… Suma y sigue. Y lo gracioso, o triste, es que sigo igual, soy una vaga. Reconozco que ahora he espabilado un poco, pero cuando lo pienso, es como si me consumiera por dentro.
Fuerza de voluntad, dicen algunos, yo no se si tengo de eso, dejé de fumar durante cinco meses, fui al gimnasio durante tres meses, fui a clase con asiduidad… ¿Quién sabe?
Y soy demasiado soñadora, tengo los pies en la tierra, pero me pierdo en mi mundo interior; y cuando digo mundo interior me refiero a las “películas” que tengo en mi cabeza, allí todo es fácil y perfecto, pero es lógico, soy yo la que lo controla todo, la que decide lo que va a pasar. Luego abro los ojos, miro a mi alrededor y me doy cuenta de que la vida que tengo que vivir es la real y que acabo de perder otra hora soñando despierta, en la que podría haber hecho algo para que la realidad se parezca poco a poco a mis sueños, aunque algo si que ya he hecho, volver a estudiar, ya se que siempre digo lo mismo, pero es que puede que sea el camino más fácil para conseguir algo, aunque eso nunca se sabe, pero necesito repetirme constantemente que lo que estoy haciendo está bien, porque sino me derrumbo.
Y con esto dejo de autoanalizarme, porque no quiero perder otro tren.
Escuchando: Blur “Song 2”
Nota: este post fue escrito el domingo 16, en una cafetería de la estación de trenes de Oviedo, sobre las ocho y media de la tarde, en la libreta del desastre, o sea donde tomo apuntes de todas las asignaturas para luego pasar a limpio.
Mucha gente piensa que los animales son irracionales, no quiero entrar en ese tema, sólo tenerlo en cuenta para algo que he pensado. El otro día vi un capítulo de los Simpson en el que Hommer y Marge eran Adán y Eva; y me hizo imaginarme a los “reales” comportándose como animales, o sea, desnudos, haciendo sus necesidades por cualquier sitio, procreando encima de cualquier piedra, etc y todo si sentir vergüenza alguna, exactamente igual que los animales.
Teniendo en cuenta la teoría sobre que los animales son irracionales, Dios castigó a Adán y Eva dotándoles de razón y todo lo que conlleva. No se si sería un buen castigo o a la larga devastador para el Creador.
Qué rallada, tanta filosofía no debe ser buena. Que si racionalistas, que si empiristas, que si la madre que me parió. Para filósofa yo, el conocimiento o información, se percibe por los sentidos y cada uno lo asimila a su manera con la razón, Dios no existe y cada uno en su casa.
Por cierto, yo no pienso que los animales sean irracionales, pero sobre esto escribiré otro día, este post es un desahogo por una clase demasiado entusiasta y el resultado de mi locura incipiente.
A las personas nos encanta criticar, sacar defectos y encasillar a la gente; y tenemos una gran facilidad para hablar como si nada con la persona a la que se acaba de desplumar sin piedad. Que nadie vaya de superior diciendo "Yo no hago esas cosas, la vida de los demás no me interesa, o soy liberal, cada uno que haga lo que quiera con su vida", porque lo hacemos todos.
Somos envidiosos y tenemos tantos complejos e inseguridades que tenemos que sacarle defectos a la gente para no sentirnos mal con nosotros mismos. Lógicamente no todo el mundo hace o le pasa esto en igual medida, pero somos bastante malos, no me atrevo a decir que por naturaleza, lo dejaré en un "por aburrimiento"
A veces me gustaría estudiar psicología, luego me doy cuenta de que sería un coñazo y realmente ese trabajo (si llegase a conseguirlo) no me gustaría en absoluto, no me agrada la idea de tener el control de la salud mental de la gente, pero me fascina el comportamiento de las personas, sus manías, sus peculiaridades, sus reacciones... Me gustaría poder ver dentro de las cabezas, escuchar lo que piensan, ver lo que imaginan, saber lo que sienten, pero es imposible.
Dicen que cada persona es un mundo, un mundo por descubrir.
Menuda rallada, me aburro. Escuchando Galygows "Roller disco combo"
Dicen que no soy nada, pero yo soy algo. Lo se, me he visto reflejado en un espejo. Son ellos los que se equivocan. Quieren engañarme, pero no podrán. Superiores en número, yo les supero en mente, astucia y fuerza. Soy el último ente libre. Ahora me dirán que se llevan mi papel porque no hay combustible. Yo se que es para que no escriba, porque soy el último ente libre. Esclavizado por fuera, pero libre por dentro. Eso es lo que más les asusta. Yo lo se, soy el último ente libre. Antes éramos más, pero poco a poco, la ventana a su mundo les fue absorviendo. Yo lo ví, ahora soy el último ente libre.
Creo que quieren matarme.
Es sábado por la noche, estás en pijama, sentada frente al ordenador y te apetece escribir. Preparas una lista de canciones en el Winamp, abres el Word y pones las manos sobre el teclado. No se te ocurre que escribir, pero sientes la necesidad de llenar esa página en blanco, así que decides escribir lo primero que se te pasa por la cabeza, lo que estás haciendo. Necesitas llenar un vacío creativo que hace tiempo no consigues saciar. Sientes que tu inspiración se va por la ventana de la habitación que has abierto para que no se llene todo de humo y no axfisiarte con este calor bochornoso de una noche de verano cuando acaba de llover. Aun sigues viendo a lo lejos los rayos de la tormenta que se está calmando y que tanto miedo te ha hecho pasar. Deberías irte a la cama, ya es tarde, pero no quieres, estás sola y necesitas hacer algo para poder dormir tranquila. La canción que está sonando te hace pensar. Empiezas a imaginarte en una situación acorde con la melodía, un bar azul, con las paredes llenas de rombos, grandes lámparas de plástico naranja que cuelgan a escasos metros de las cabezas de la gente. Te estás tomando un martini con ginebra, el refresco definitivo según tu amigo y ni siquiera te gusta. El ritmo te invade y empiezas a moverte. Como siempre, te fijas en la gente y su calzado. Y tu mirada se pierde. Y el tiempo pasa. Y siempre estás pensando.
¿Qué coño voy a hacer?
Estoy atravesando una etapa de cambio en mi vida. Lleva tiempo ocurriéndome, pero me acabo de dar cuenta.
Primer síntoma: quiero hacer algo nuevo con mi pelo, cambiar de imagen. Me aburre mirárme al espejo y ver siempre la misma cara.
Segundo síntoma: pasotismo ergo búsqueda de nuevas ideas para emplear mi tiempo libre en algo útil y que no me aburra.
Tercero: No me apetece escuchar ningún tipo de música o grupo que esté en mi poder. Eso supone llamar a alguien para que me asesore sobre nuevas tendencias musicales desconocidas para mi.
A partir de ahi, la imagen que tengo del mundo, la gente o la vida, cambia radicalmente. Me doy cuenta de que ya no me preocupa en cierto modo lo que ocurre en el mundo. Con esto no quiero decir que no me importe que esté muriendo gente de hambre, en las guerras, que haya paro, maltratos y un larguísimo etc. Sonará raro, pero quiero llenarme espiritualmente y que la gente que me rodea lo haga. No me interesa ser una revolucionaria luchadora por los derechos. Ya no, si es que alguna vez llegué a ser así. La gente es infeliz, nadie es feliz. ¿Por qué? Están vacíos, yo estoy vacía. Subes en un autobús y solo ves miradas perdidas, dos pozos de agua sin vida en los rostros de completos desconocidos. O escuchas conversaciones sobre novios que dejan a sus novias, que Paquita se ha muerto, que el sábado alguien se pilló un pedo de la hostia, que otro está en la lista de espera, que bla bla bla.
La vida es solo y por orden más o menos cronológico, nacer, formarte, divertirte, luchar por alguna idea que seguramente no te afecta, pertenecer a una tribu urbana, trabajar, reproducirte, jubilarte y morir. Para que todo eso se te haga más ameno, ponen a tu disposición una completa plataforma digital con entretenimiento para todo tipo de mentes vacías, cinefilos, adictos a la prensa rosa, pensadores, viajeros, pequeños, grandes, cachondos mentales, enamoradizos, necesitados de humor... También libros para que memorices frases que dan mucho que pensar y se lo sueltes al primero que venga para demostrar lo listo que eres, música para todo tipo de estado anímico...
¿Qué ha sido del ser humano? ¿Dónde está esa máquina casi perfecta, capaz de pensar y actuar por si misma?
No se ni lo que digo y eso me jode. Queremos tenerlo todo, pero nada nos llena. Todos tenemos nuestra particular busqueda interior, pero no tenemos ni zorra idea de lo que buscamos. Que rallada.
Bienvenido al viaje visual de la mente de Tirolesa´s chow.
La cabeza de Tirolesa les da la bienvenida a este viaje interestelar por su interior, las salidas estan arriba a la izquierda, basta con pulsar el botón rojo con una equis blanca dentro. Tengan paciencia si algunas imágenes no cargan, las conexiones de Tirolesa fallan a veces debido a la mala vida que llevó en un tiempo pasado.
Viajes Tirolesa no se hace cargo de las impresiones que estas imágenes puedan causarles. Sin más, les deseamos un feliz y agradable viaje y les instamos a imaginar. Un saludo Mary Popins.
- Las avestruces se reproducen con el pico. Es decir, el macho segrega el esperma a través de unas glándulas situadas en su paladar. Éste se acerca a la hembra, mueve su cuello como si de una danza se tratase y si la hembra acepta, abrirá la boca y dejará que el macho le deposite el esperma en su lengua, para que, al tragarlo, quede embarazada. Es por ello, que las avestruces tienden a enterrar su cabeza bajo la tierra, para conservar a salvo su esperma y preservar la especie. Todo comportamiento animal, como siempre, tiene su explicación lógica. Se cree que los besos con lengua, llegaron de África. Los primeros exploradores que se relacionaron con tribus africanas, observaron la rara costumbre que tenían las parejas de besarse con la boca abierta. Tiempo después se descubrió, que era un ritual para la fertilidad, se creía que, como las avestruces al “besarse” de esa manera, siempre parían, les traería buena suerte para procrear hijos fuertes, ágiles y veloces, al igual que los avestruces.
-¿De verdad?
-No, me lo acabo de inventar.
Quieres ver bellos paisajes, oir dulces melodías. Quítate la venda de los ojos , límpiate la cera de las orejas. El velo de las maravillas que cubre tu cabeza no te deja ver la realidad. Eres uno más. Lleno de falsos ideales y propósitos, cuyo único miedo es que un huracán se lleve volando el trapo mugriento que protege su cerebro y empiece a ver las cosas como son. Si no quieres ver más allá de tu nariz ¿Cómo verás los bellos paisajes? Si no quieres oir más que un "todo va bien" ¿Cómo oirás dulces melodías? Sólo eres uno más. Métete en tu cajita, cierra la tapa y tírate al mar.
No me malinterprete señor Bond, yo solo quería manosearle los pechos. Pero ha resultado ser usted un frígido desconsiderado. Le invito a cenar, abro una botella de mi mejor vino, en la gramola suena Barry White y usted me aparta la cara. ¿Le aprietan las correas? Podría desaflojárselas un poco, pero me arriesgo a que escape utilizando una de sus artimañas.
Señor Bond ¿Le gustan los pepinillos?
El Sr. X es el hombre que espía tu vida. Entra por la puerta que dejaste cerrada y sale por la ventana de persianas bajadas. Sigue las huellas que creías borradas. No cesa de mirarte allá donde vayas. Hagas lo que hagas. Te escondas donde te escondas. Notas su presencia pero tú noves nada, siempre te ve de frente desde tu espalda. Sabes que está ahí. Eso te incomoda. Pero sigues con tu vida porque te acabas acostumbrando al picor en la nuca. Es la sombra que siempre acecha. Es la sensación de hormigueo cuando haces algo malo y sigues haciéndolo a sabiendas de que lo es. Es tu puta conciencia ¡Joder!
Vivió una vez en Wisconsin un cacho de jamón llamado Manolín que quería ser astronauta. Cuando tenía 14 años, Manolín decidió contarle a su padre cual era su sueño, pero su padre no toleraría que su hijo desperdiciase su vida de esa manera. Creía que lo mejor para él sería trabajar en el negocio familiar, para tener asegurado un buen futuro.
Pasó el tiempo y vio que su hijo seguía fantaseando con fugarse a Atlanta e inscribirse en la Nasa (lógicamente no se cual es el proceso que hay que seguir para ingresar en la Nasa o lo que hay que hacer para ser astronauta y no pienso informarme, esto sólo es una historia estupida) así que le cortó una pierna para que no pudiese valerse por si mismo y no pudiera irse del pueblo.
De padres cabrones está lleno el mundo. PIENSA POR TI MISMO y que nadie te quite la ilusión. El destino lo escribe cada persona, que nadie maneje tu vida o no habrás vivido, porque cuando tu decidas serás "libre".
Oscuro es el camino que lleva al sin saber. Caminas a tientas, no sabes por qué, no sabes hacia dónde. Mientras, piensas en la luz, en la salida del túnel, en lo que habrá ahí fuera, te haces ilusiones que te animan a seguir con fuerza y cuando por fin sales, te das cuenta de que posiblemente estabas mejor dentro, pero te da miedo volver, es demasiado triste, demasiado inhumano. Miles de personas pasan a tu lado, monos de feria haciendote carantoñas para que sonrías, cuando lo único que necesitas es un brazo que tire de tí para sacarte y que te acaricie y abrace cuando estés fuera. Y lo más importante, que te sujete para no volver a caer. Pero ese brazo nunca llega, sobrevives algún tiempo imaginando que llega, pero desesperas y pierdes la esperanza. Vivirás en la oscuridad por el resto de tu vida, es lo que te queda, unos nacen estrellas y otros nacen gusanos de tierra y a ti te ha tocado ser un puto gusano de tierra.
Cosas estúpidas que haría si tuviese poderes. Las ideas que vas a leer a continuación son totalmente egoistas y para mi único beneficio, así que si eres de esos que predican la solidaridad y no captas el tono de guasa de este post, no sigas leyendo.
1- Crearía unos cigarros que no afecten a la salud.
2- La comida no engordaría y tendría un microondas mágico que con decirle lo que me apetece comer me lo prepara en dos segundos (si alguien vio El Quinto Elemento, sabra a que me refiero)
3- No tendría que ir en bus a ningún sitio nunca más, porque me teletransportaría, así que viviría en una casita en la montaña con todo tipo de lujos y si me apetecen unos burritos "pof" me planto en México, si me apetecen unos rollitos de primavera "pof" china, que me apetece darme una vuelta por Manhatan, Florencia, Londres... "pof" como bajar a por el pan a la esquina.
4- No me haría falta estudiar porque lo sabría todo, aunque iría a la universidad por ocio.
5- Tendría una tarjeta de crédito inagotable, así que no tendría necesidad de trabajar, pero algun proyecto que tengo pendiente en plan paja mental, seguramente saldría adelante (me refiero a esa agencia de publicidad que ronda mi mente)
6- Tendría el control absoluto del tiempo, así que por la mañana si veo que quiero seguir durmiendo junto los dedos indices de mis manos y se pararía el mundo (como en aquella serie, Ibi creo que se llamaba la protagonista, cuyo padre era extraterrestre y paraba el tiempo haciendo eso mismo y lo reanudaba dando palmas creo recordar) y cuando hubiese descansado lo suficiente todo volvería a su sitio; y podría volver a vivir los buenos momentos tantas veces como quisiera.
7- Podría cambiar mi imagen a mi antojo, si un dia me apetece tener el pelo rubio, morado, largo, corto, rizado... y lo más importante ¡No tendría que depilarme!
8- Todas las personas que me han hecho algo malo, serían castigadas con unas dolorosas hemorroides crónicas de por vida y serían ellos impotentes y ellas aorgasmicas osea, insatisfechas sexuales.
9- Tendría una jardín de la alegría que ocuparía como diez campos de fútbol.
10- Tendría una sala de torturas (entiendase torturas por: las mil patadas en el culo, cosquillas, estiramiento de mofletes, camara de los malos holores y un largo etc, todo ello acompañado por los grandes clásicos de la música española, la campanera, el tractor amarillo, no te vayas de Navarra y muhos más) y encerraría a Aznarín, Anita Botella, Anita Palacio, Bush, Blair, Fraga, Tamara, los grandes hermanos y en resumen, toda la basura que pisa el mundo.
11- Tendría al lado de mi jardín de la alegría la montaña rusa más grande del mundo y cada día tendría un trayecto diferente.
12- Podría ver lo que piensa la gente.
13- Tendría un cine en casa y absolutamente todas las películas que se han hecho en a historia del cine, series, cortos, dibujos animados etc, doblados y en versión original con subtitulos.
14- Podría volar.