Hoy no tengo nada qué decir, nada qué contar. Sólo un huevo de encargos que entregar y nada de sol que me pueda quemar. Detesto la esquizofrenia del clima de lima. Es una cosa que me puede bajonear sin motivo, sin razón, sin puta circunstancia. Sólo porque sí, porque le dio la gana. Y hoy por mi casa todo era niebla, nubes negras y nada de luz que no se apague con un interruptor. A veces, esas corrientes que todo lo inundan con frío me tuercen los planes y también los ideales, me hacen salir enojada de la cama, molesta de la ducha, defraudada de mi casa. Y llegar hasta este escritorio donde pienso que siempre es mucho mejor ser una persona distinta, no me hace menos complicado el día. Hoy no tengo ideas que hilbanar, nada de notas que destrozar. Estoy yo, un sol que no calienta y puras ganas de querer agarrarme del cuello y lanzarme por esa ventana. Qué lástima que apenas estemos en un segundo piso, hay cerebros y complicaciones que necesitan demasiada altura para tomarse un respiro.
FUCK QUE BIEN ESCRIBES POR DIOS
Opinó :::.. DamianNo te recomiendo el decimo piso, la ultima vez que vi por la ventana se cayeron mis lentes :(
Opinó :::.. del mundo, un lugar atras.Uno de las ciudades que me gustan pero que nunca elegiría para vivir es Londres, precisamente por eso, por la jodida niebla.
Te entiendo, Paula
A mi me gusta la niebla, pero no las nubes oscuras por mucho tiempo.
Opinó :::.. Aymaguarda con las alturas!
Opinó :::.. onophrius