Hace demasiados días escuché en clase de Teología
que dios reside en una área muy concreta del cerebro humano.
¿Qué pasaría si nos extirparan esa área a todos?
O mejor aún, qué sucedería si nos la extirparan a todos excepto a uno.
Sería tachado de demente.
Es curioso que lo único que diferencia a la locura de la religión es el número de seguidores.