Luces y sombras

It's been a bad day (please don't take a picture)

Hoy este blog debería llamarse “Sombras y más sombras”. O mejor: “Sombras y más sombras y me cago en tu puta madre”. Hoy nada ha salido bien. Todo mal, y lo que no, peor aún. De nada ha servido acostarme temprano y haber dormido ocho horas. Sencillamente es el día equivocado. La persona equivocada. Y el trabajo equivocado.

Me van a echar del trabajo. Ya me lo olía hace tiempo pero hoy casi se ha confirmado. Estoy cometiendo muchos errores y en ese trabajo los errores cuestan muy caros a la empresa y a sus clientes. Suelen ser estupideces, despistes, o a veces cosas sencillamente inexplicables pero que de repasar mejor lo que hago no sucederían. Mi jefe no está contento con mi rendimiento- y yo tampoco- porque los trabajos se retrasan y los clientes se cabrean. Tampoco me gusta el trabajo, pero vaya, para ir tirando y ganar experiencia no está mal. No me echará ahora, me ha dicho que las cosas tienen que cambiar durante este mes para mi continuación en enero. Y no cambiarán, porque yo ya hago todo lo que puedo. Hoy antes de ir a comer he estado a punto de decirle que me iba, que dejaba el trabajo. Al final no lo he hecho porque quedarse sin trabajo antes de Navidad es un asco. El dinero, claro, pero no sólo eso. Toda esas comidas familiares con todo el mundo preguntándote por el trabajo y qué vas a hacer ahora. Que les den, aguanto hasta que me echen.

Con la mensualidad que cobre por el mes de diciembre, que a buen seguro será la última de este trabajo, quisiera hacer algo grande. Básicamente irme lejos (quién me conozca mínimamente ya sabrá de esta obsesión mía), desaparecer. El destino siempre es Inglaterra, pero no sé qué ciudad (Londres, Oxford, Birmingham, o el mágico pueblecito de Stratford Upon Avon). Me encanta ese país y la vida que se hace allí. Llueve mucho, hace frío, los días son grises y las noches eternas, y la gente está en los bares desde las seis de la tarde. Podría buscar trabajo allí de camarero o en un hotel, o podría emplear todo lo ahorrado en alquilar una habitación y recluirme allí con el portátil para escribir y leer (y dejarme crecer la barba y tener un aire de genio excéntrico). Volvería aquí al cabo de unos meses y retomaría mi vida. Entonces la vida podría joderme tanto como quisiera porque yo ya habría cumplido mi estúpida fantasía.

Y como a este post para ser comercial (y recibir algún comentario) le hace falta una foto, aquí la tenéis…