No hay nostalgia peor que añorar lo que nunca jamás sucedió.
Joaquín Sabina (Con la frente marchita)
Con la voz de Adriana Varela, esta canción me hace sentir nostalgia. Nostalgia de un amor platónico, enamorada de alguien que no suspira por otra persona sino por otro lugar, por alguna otra cosa, algo que nunca ha ocurrido. Pero también nostalgia del sentimiento de enamorarme, de amar a alguien y ser correspondida, y de volver a vivir.
E irremediablemente me pregunto: ¿alguna vez viví? Si es así ya no me acuerdo, pero siento nostalgia por esa vida que yo misma me he negado y que ahora lucho por recuperar, aun a pesar de los días bajos que atravieso y una (esperemos que) ligera recaída, de la que tengo la firme intención de recuperarme en un par de días.
Nostalgia de una vida que una vez tuve o tal vez con la que he soñado este tiempo; pero ya no persigo un sueño, ahora suspiro por ello. Por algo real aunque no haya existido o no exista aún, algo que ya no es lejano, desde luego no tanto como el río de la plata, sino más bien como el mar andaluz, mar que tengo muy cerca, mar que casi puedo sentir en esta noche en la que ha caído cuatro gotas, casi puedo sentir la brisa, las olas enredándose en mis pies, el sol en mi piel...
Ya casi puedo sentirlo. Ya lo probé días atrás, y me gustó. Volver a salir, volver a vivir. Pero como todo lo nuevo asusta, como aprender algo ya de mayores nos resulta más difícil, como el motor que ha pasado mucho tiempo de la última vez que arrancó, lo de estos días ha sido un amago, un curso preparatorio, algo preliminar, lo de verdad viene ahora. Pero pasito a pasito, sin hacer planes y sin agobios, sin tiempo para sentir nostalgia por vivir sino disfrutando la vida.
Y ustedes que lo vean.
Escrito por lorayk el 9 de Abril a las 02:13 AM