Pelos de gato
Cubierta de pelos de gato se despierta
Contándole a su vida lo que le sucedió
No tiene ni puta idea de cómo subió la escalera
Y mirando la almohada vio la cara de un cualquiera
Que se tiró
Y le dejó unas llaves, una nota y un adiós
Y antes de salir se desayuna la primera
Que ya estaba puesta antes de que saliera el sol
Sueña diez segundos que el que le abrió la puerta
Y cuando llegue de trabajar le tendrá puesta la mesa
Y una lágrima amarga recuerda
Que se está metiendo a vieja
Y que la luna la aconseja
Que se olvide del amor
Que no hay sitio en la miseria
Y que en su via a sio...
de nadie compañera
Y a la vuelta
El viento la acompaña hasta su celda
Que no es más que ella misma en su salón
Sin nadie a quien contarle batallitas de farol
Que ella inventa para olvidar el dolor
Y una lágrima amarga recuerda
Que se está metiendo a vieja
Y que la luna la aconseja
Que se olvide del amor
Que no hay sitio en la miseria
Y que en su via a sio...
de nadie compañera
Albertucho, Que se callen los profetas
Vuelta a clase (2)
Bueno, ayer viernes por fin me decidí. Llamé al centro a preguntar cuándo era lo de la matrícula: me dijeron que llamara más tarde cuando ya hubiera alguien en secrataría.
Llamo a mi madre un montón de veces hasta que por fin oye el móvil y me responde: que por favor llamara ella, yo ya no podía con la ansiedad. Un nudo en el estómago y dificultades para respirar, la más fuerte hasta el momento.
Resulta que en la guía el número está equivocado, había llamado a otro instituto. Después de un montón de llamadas, mi madre me consigue el número correcto, llama, y le dicen que llame más tarde (ya eran las 11 de la mañana).
Al final tuve que bajar a solicitar plaza, dado que el último año no estudié allí, así que no sé si lo haré este año o no, depende de si quedan plazas.
Ahora mismo no sé qué haré si no estudio, porque trabajar, tal y como están las cosas por el momento (la ansiedad y demás), lo tengo muy difícil.
Lo que tengo claro es que no quiero seguir aquí como aún estoy, aunque me cueste.
Vuelta a clase
Hace siete años echaba la matrícula para 2º de Bachillerato. Hoy, siete años después, tenía que haber ido a mirar qué día era. Siete años después de que acabaran mis compañeros, espero acabar el curso, que sólo me quedan 3 asignaturas, como lo esperaba el año pasado, y el anterior, y el anterior...
Anoche no dormí pensando que hoy sin falta tenía que ir ya a mirarlo. Esta mañana he pasado de ir.
Aquí estoy, pensándome si voy a salir después, en todas las cosas que tengo pendientes de hacer y que, por supuesto, no haré, y ya empieza a darme el dolor de cabeza.
Lo "mejor" en estos casos, acostarme y tapármela con las sábanas.
Veremos si consigo no hacerlo. Tengo que espabilar y ponerme al día YA.
Necesito salir, pero me quedo en casa
¿Por qué cada vez que quiero salir mi amiga no tiene ganas? ¿Por qué nunca adonde yo quiero ir? ¿Por qué cada vez que quiero hablar con alguien no hay nadie conectado/ me responden a los sms / dejan sonando el móvil hasta que no les queda más remedio que contestar pero a desgana?
¿Por qué cada vez que me encuentro bien pasa algo (o no pasa) que me deja hecha una mierda? ¿Y por qué mi existencia es tan vacía y carente de sentido que algo tan simple y nimio como eso me afecta tanto?
Gracias, puta vida asquerosa, de tantas ostias que me llevo, digo yo que algún día me cansaré y te enseñaré los dientes.
Aunque quizá luego pase algo y me los acabe rompiendo :/
Soledad y rechazo
Me siento sola
El viernes pasado fue mi cumpleaños. El jueves llamé a mi mejor amiga para quedar en vernos, y se lo dije. No me llamó. El viernes tampoco. La llamé el sábado para ver si le pasaba algo, y me dijo que no, no me felicitó, ni nada.
Esta mañana le he mandado un mensaje para ir a la playa o vernos, puedo pasarme por su trabajo por la tarde que no hay nada que hacer, y tampoco me ha respondido.
Me siento rechazada por todos. Me encuentro con antiguos compañeros de instituto por la calle que no me saludan, mis amigas, aun llamándolas yo y diciéndoles que es mi cumpleaños, pasan de mí, incluso una que al día siguiente es el cumpleaños del novio y tendría que acordarse, nada.
No soporto la hipocresía. ¿Dónde quedan aquellas palabras que siempre se dicen por quedar bien pero que yo creía sinceras? ¿Dónde aquellos “para lo que necesites, aquí estoy” y demás? Seguramente en el mismo sitio donde estaban mis amigas cuando yo estaba tirada en la cama queriéndome morir y no eran capaces ninguna de venir a verme aunque pasaran por aquí a diario para ir a trabajar. A lo más, un SMS, ni siquiera una llamada para preguntar si me había muerto ya.
Yo sé que no he estado para nadie en todo este tiempo, ¿pero es que ya no queda nada de la amistad que había para pasar eso por alto, o bien decírmelo cuando pregunto? Me duele mucho que hagan como si les importara algo si no es así, que lo digan claro y punto.
Yo no creo merecerme eso por mucho que les haya fallado en el tiempo que he estado con depresión. Yo jamás he reprochado que no vinieran a sacarme si quiera un rato al parque a que me diera el aire y que habláramos, porque sé que ella también tiene qué echarme en cara. Pero joder, ¿es que ya no queda sitio en la vida de mis amigas para mí? ¿Ya no soy importante para nadie?
Ya no sé si es que yo veo fantasmas donde no los hay o que verdaderamente están así las cosas, pero en días como estos, por muy animada que me levante, de lo único que acaba por quedarme ganas es de tirar la toalla ya, honestamente ahora no sé si merece la pena.
