Julio 09, 2004

La dirección opuesta

El jueves pasado bajé de madrugada a la cocina a explorar la nevera, y me comí un yogur viendo la tele. Daban un programa sobre "tunning". Para el que no sepa lo que es, lo explico brevemente:

Es una afición consistente en gastar cantidades enoooooooooormes de dinero en "personalizar" el coche, normalmente de gama media, dándole una apariencia más deportiva y agresiva, y equipando su interior con toda clase de dispositivos electrónicos (audio, imagen, etc.). Todo ello implica un intensivo trabajo que convierte a cada coche en una pieza única.

Externamente los coches quedan así. Por dentro, en temas de audio quedan así

Bueno, una vez explicado puedo seguir.

Podría en primer lugar verlo desde un punto de vista del análisis del mercado. El "tunning" responde a los impulsos de los consumidores de personalizar sus posesiones. Así vemos que los móviles, de parecer un ladrillo con antena han adoptado miles de formas y se venden toda clase de accesorios, en especial, carcasas que modifican su aspecto. Y el mismo fenómeno ha alcanzado a los PCs de sobremesa. Desde un punto de vista psicoanálitico podríamos decir que los aficionados al "tunning" proyectan en el coche, tótem masculino de la sociedad de consumo, su identidad y su ego. Desde un punto de vista sociológico podríamos estudiar el estrato socio-económico de los aficionados, el rol de la mujer en ese mundillo, etc.

Yo simplemente digo que me parece la mayor estupidez del mundo. ¿Qué sentido tiene gastarse todo ese dinero en un coche utilitario para aparentar lo que no es? ¿Y qué sentido tiene añadirle al coche accesorios que merman su utilidad como vehículo de transporte? Por ejemplo, uno de las accesorios más habituales son spoilers y faldones, que hacen que el coche roce sus bajos en cualquier parte. El maletero se ocupa totalmente con los altavoces del equipo de sonido, etc.

Podría volver a una aproximación socilológica, y decir que es una afición propia de personas jóvenes, de extracción social baja y de recursos culturales limitados. [En otras palabras, descerebrados del tres al cuarto y pésimo sentido de la estética que se gastan lo poco que ahorran con su cutretrabajo en modificar el coche. Una buena forma de atraer visitantes al weblog, crear polémica :-) ].

Pero lo que quería señalar era esa sensación de extrañeza. ¿Por qué cojones la gente hace eso?

El viernes por la mañana me encontré en el buzón el catálogo de móviles canjeables por puntos de mi compañía de telefonía móvil. En un principio la vena tecnofetichista en mí me hizo mirar con interés el catálogo para ver qué móviles podría comprar a un precio razonable con los puntos que tenía acumulados, para luego caer en la cuenta que no tenía ningún motivo para cambiar mi Nokia 5210. Funciona. Y todas las supuestas ventajas de los nuevos móviles (sacar fotos, mensajes multimedias, navegación WAP e i-mode) no son más que vías de las compañías de teléfono para sacarte la pasta.

Siempre sobreestimo a la gente. Cuando veo una moda realmente estúpida siempre pienso que la gente no va a ser tan tonta para caer. Eso dije cuando vi los primeros móviles con cámara a 500 euros en la TV. A las pocas semanas en los bares de copas gente de mi edad se hacía fotos con sus amigos para mandárselas a personas en el otro extremo de la ciudad.

Me desagradan los piercings y los tatuajes. Me parecen modas absurdas. Y me sorprende como de ser algo que sólo encontrabas en marineros y presidiarios, se haya convertido en algo supercool. Ahora que hace calor y las chicas van con bastantes centímetros de piel al aire, es extraño no encontrar una espalda sin tatuar.

Mis palabras podrían sonar a un huraño anciano prematuro. Quizás ya sea demasiado viejo ya para entender la mentalidad de los críos (sí, digo críos) de 18 años. Ellos estaban aprendiendo a hablar cuando yo ya había leído "El Nombre de la Rosa" o "Oh, Jerusalem".

Pero como hoy le comentaba a F., al salir del trabajo, más allá del arranque puramente egocéntrico de creerme por encima de modas comerciales en las que la mayoría se deja atrapar felizmente, yo me pregunto por qué, por qué me tocó a mí mirarlo todo con descreímiento. Esa es la raíz de esta soledad. En mi salvación, cayó esta condena.

Escrito por Lobo a las Julio 9, 2004 03:14 AM
Comentarios

coche tunnig=coches de "too fast, too furius"

Escrito por mii a las Julio 9, 2004 05:19 PM

La diferencia es que los "tunneros" jamás corren con sus coches, porque al primer bache se le joden los bajos. Y aparte, que después de gastarse la pasta, no están por la labor de que les pase nada. Se limitan a lucirlo e ir a concentraciones.

Escrito por Lobo a las Julio 10, 2004 12:34 AM