Está amaneciendo; otra noche durmiendo sola, bueno durmiedo es un decir porque apenas he pegado ojo en toda la noche, hay algo que me preocupa, algo me inquieta, me siento perdida. "Encuentra el valor de ser libre para poder ser feliz" eso tendría que hacer; sin embargo quedarme despierta me ha recordado que puedo volver a ser quien era, es decir, puedo volver aprovechar la noche (cosa que el año pasado hacía en la residencia donde estaba) porque puedo hablar y hablar, planificar, "pensar en mi misma y en mis cirsunstacias", soñar, volver a ser yo, porque si realmente supiera ahora cómo estoy siendo y lo en lo que me estoy convirtiendo...(buf); parece que siempre estoy enfadada, discutiendo, que sólo busco atención cuando nunca he necesitado que nadie me la prestara,... estoy muy rara. Me cuesta tener una conversación.
La distancia aunque parezca que no aumenta, se hace más y más larga poco a poco, como tiene que ser (supongo) ¿y es que no puede seguir todo como antes? ( él odia esta expresión: y es que, y es que...je je je ).
Se acerca el puente y a sé cómo va a ser esa semana, demasiado ocupado para hacer algo conmigo; apenas recuerdo la última película que vimos juntos, cuando antes siempre estábamos viendo alguna. El tiempo se ha detenido, tan sólo para decirme que deje de ser y que me convierta, crece, eso es lo que tenía que hacer, convertirme en una persona adulta dejar de ser una niña, puede que una niña tonta sea ahora pero ¿quién no se ha convertido en niña cuando se ha enamorado?