El verano está aquí y la calor hace que no te olvides de ello. Los días
son más largos y la vacaciones te dan la opción de cambiar de paisaje y organizar las
cosas que más te agradan.
Sustituimos los paisajes tristes por otros más intensos, envueltos en una sensación
de bienestar general, cambiamos los colores de la vida y arrinconamos las realidad en
un tiempo perdido.
Sí, las vacaciones están aquí y parte de mi recuerdo y añoranza aparecen como fantasmas. No
lo puedo evitar. Regreso a un tiempo perdido que añoro y que necesito, lleno de momentos mágicos.
Un tiempo en que creía en la felicidad y la esperaza.
Sólo yo tengo la llave y detrás de mí se cierra. Cada verano entro y me acomodo y me pregunto porque?...
El muro sigue ahí.....