Escribiendo que es gerundio

Bueno, ¡Qué abandonado tengo el blog! Debe de ser que ya no me como tanto el tarro .

Reconozco que cada día me aburro menos en el trabajo, por lo menos estoy entretenida. Para mi es muy importante porque llevo fatal venir a trabajar para nada, prefiero quedarme en casa. Noto una gran diferencia entre trabajar en Galicia y Madrid. Bueno no sólo en trabajar sino en la forma en que se relaciona las personas en esta ciudad, sin tantas complicaciones ni rollos, ni historias. Todo es más fácil o será que yo todo lo hago más fácil, quizá sea porque no le doy tantas vueltas a la cabeza, lo hago todo más fácil; sea por lo que sea lo prefiero mil veces.

El fin de semana pasado estuve en Galicia, tenía que ir para resolver uno temillas así que aprovechando que allí no tenían vacaciones pude resolver mis asuntos. Se me hace raro, sobretodo porque al no tener casa, tengo que ir a la de mis padres, es rarillo. No porque no tenga sitio que por eso no hay problema simplemente porque se hace raro. Mis padres es su afán de hacerme más nula no me dejan hacer nada o quizá sea que me encuentran nula y consideran que no puedo hacer nada. Aún no lo se, es un misterio como el del huevo y la gallina.

Ahora solo a mentalizarme que viene el calor y a mi me encanta la ropa de invierno, las botas. Así que no me queda más remedio que acostumbrarme otra vez a los zapatos de verano y ropa de verano. ¡ Qué dura es la vida ¡ ;-)

Estoy en una fase absolutamente insoportable porque es cuando una piensa: que después de la tormenta sale el sol, e incluso piensas que la vida no es tan mala y que todo lo pasado ha valido la pena porque me permite ver la vida con otra actitud y bla, bla, bla. Como os digo insoportable.