La enfervorecida búsqueda por parte de las empresas de la manera de maximizar su beneficio, acción popularmente conocida como vender, ha dado en España con su filón de oro.
Ni el turismo, ni la dieta mediterránea, ni las Barbies vestidas de faralaes para poner encima del televisor. Lo que vende en España es el sentimentalismo llevado a sus límites.
Un ejemplo: Eurojunior, el programa de monstruitos de TVE destinado a escoger a uno de los monstruitos y enviarlo a un Festival de Eurovisión para monstruitos cuyo mayor logro será, sin duda alguna, el de crear traumas irreversibles a las pobres criaturas que se queden con cuatro "points" y en el furgón de cola.
El mencionado Eurojunior resultó ser un programa exitoso nutrido con numerosas pachangas de dudosa autoría y cuyo ganador fue un niño (Sergio Jesús) que interpretó una balada que, a primera escucha, no resaltaba entre las pachangas del calibre de "Chachi Piruli" o "Mueve el Ombligo".
Pero la balada ganó. ¿Por qué? Porque el niño se la dedicaba a su mamá fallecida y claro, ¡Oh que pena! votémosle, él se merece más que nadie ser candidato a engrosar las listas de "eurovisiovos depresivos".
Gracias a Dios, un segundo puesto le libró de la depresión (de momento...). Algfunos pensarán: si consiguió un segundo puesto al final sería que no era tan mala. No era tan mala, si en España destacó por su contenido, en Europa destacó por ser una balada entre tanta canción pseudo-schlager. Lo importante es que el sentimentalismo nacional la llevó a ganar en España.
Otro ejemplo. A medida que aumenta la concienciación ciudadana ante la violencia de género ha ido aumentando paralelamente ese movimiento musical que Cristina del valle cultiva a la perfección y que llamaré el "Pa solidari@, Yo". Dudo yo mucho de que un dúo "a lo Pecos", de surgimiento estival y cuyo nombre no mencionaré para evitar que miles de fans histéricas me llenen los comentarios de tonterías, pretenda realmente con su canción "dedicada a las mujeres maltradas" sea solidarizarse en lugar de vender más discos. Y también dudo mucho que la cantante pachanguera Merche haya hecho una canción sobre el mismo tema para solidarizarse en lugar de para intentar vender algún misero disco en alguna estación del año que no sea verano.
Como estos ejemplos, cientos y cientos, que rima y todo... A lo mejor, en un principio, no te das cuenta, pero si te fijas descubrirás miles de "productos sentimentalistas" ya bien sean musicales, televisivos, publicitarios, etc. Y ten en cuenta que los que yo he puesto son los "light", porque del sentimentalismo al sensacionalismo hay un paso, y de sensacionalismo tampoco andamos escasos, aunque lo reconozcamos más y lo tengamos más asumido...
Posted by Ish at Enero 7, 2004 07:34 PMflowchart, n. & v.:
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