Marzo 23, 2003

"No me chilles, que no te veo" dijo la unimente del PP

He tenido que prometerle a mi madre que no expondría mi integridad física a los azares testosterónicos del brazo represor de esta dictadura fascista en que se ha convertido el ya dudosamente democrático Gobierno de la Nación (para los que no estén atentos: ser de derechas, fascista, es algo malo). Gracias a eso no he tenido el honor de ser apaleado por ninguno de los ocupantes de esas 27 lecheras que han aparecido por Callao a eso de las siete...

Yo pensaba que los funcionarios eran seres humanos. Un amigo está opositando a administrativo; tengo un vecino que es policía y es una de las personas más sensatas que he conocido en mi vida; tuve un amigo militar...
Sí, mi pobre experiencia me decía que eran personas, más o menos razonables, con sus capacidades mentales y sus voluntades en plenitud (algunos, al menos). ¿Esos tipos que se bajan de las lecheras no son humanos? Sí. Demasiado. Son hábilmente paranoizados, son gente acojonada y armada... que se enfrenta a dos millones de pacifistas. El diccionario dice que el pacifismo es un conjunto de doctrinas encaminadas a mantener la paz entre países, y los pacifistas son sus seguidores o defensores. El diccionario no dice nada de que los pacifistas hayamos de ser gilipollas.

Cuando reiteradamente se insiste en pisotear y difamar la dignidad de muchas personas, probablemente algunas acabarán, iracundas, pagando a sus opresores con la misma moneda. Bueno, casi, porque en manos del pueblo solo está la calderilla. Los billetes gordos los manejan esos sinvergüenzas que no se han querido enterar de lo que significa democracia porque les interesa más esa fantasía de dictadura en que viven. No, no estoy justificando la desobediencia civil, porque Joaquín me ha dicho que es un delito. Yo entiendo que en una democracia, mal que nos pese, lo que debe pesar es la voluntad del pueblo. Y en estos días se comprueba que lo que tiene el pueblo no está en absoluto cerca de lo que razonablemente debiera ser un poder cívico.(Para los mismos de antes: poder no significa lo que ellos gustan practicar, poder significa una capacidad de llevar a la práctica una voluntad común).

En contra de eso encontramos a un grupo de gente a los que calificaría de discapacitados psíquicos si no fuese por el respeto que me merecen quienes de verdad padecen alguna enfermedad así y no pretenden manejar unas responsabilidades que no les corresponden. Y a esa gente demostrando que no duda en azuzar y justificar las acciones de sus brazos armados contra un pueblo al que desoyen y humillan. Un pueblo al que han arrebatado su legítimo poder. Un pueblo del que esos policías no dejan de ser miembros, al igual que sus madres, sus hijos y, si es que alguien les quiere, ese alguien también.

Quizá esa gente despistada aún no se haya dado cuenta: estoy indignado. Estoy indignado porque se mienta de esa forma, porque se manipule mi intención junto a la de millones de españoles (y de ciudadanos de todo el mundo, conste). Estoy indignado porque hayan convertido a los representantes elegidos con el voto de mis padres y familiares en el blanco de sus "argumentaciones para descerebrados". Estoy indignado porque siga habiendo en este país descerebrados que les apoyen, les justifiquen, les defiendan o, peor aún, que comulguen con su basura. No les pido a esos descerebrados (sería mucho) que comulguen con mi basura. Les pido que pongan dos luces a sus cabecitas y razonen las cosas.

Estoy indignado porque hasta dentro de un año no puedo botarles. Si querían mantener una dictadura franquista póstuma, que hubieran tenido la decencia de avisar. Porque así el menda hubiera podido elegir.

Y ahora viviría cojonudamente en Canadá y mi madre no tendría que preocuparse por si salgo a la calle a defender nuestra voluntad.

Posted by germanmj at Marzo 23, 2003 04:05 AM
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Posted by: Levitra on Octubre 11, 2004 06:02 AM
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