Listo.
Ya fue.
No hay ganas. No hay fotos... principalmente no hay más espíritu.
Fue, definitivamente.
Agradezco a todos aquellos que en algún momento pasaron por el blog, hayan o no hayan dejado mensajes: Agradezco a los que los dejaron por sus molestias, y agradezco a quienes no lo hicieron, emancipando su tan sabia decisión.
Cuando uno no entiende bien por qué mierda está haciendo algo, me parece que significa que lo mejor es dejar de hacerlo.
Dudo mucho que alguien alguna vez lea este deprimente texto, pero bueno sentí necesario el escribirlo... me soba el pete que a alguien le moleste.
Nada... sean felices... odien este blog ya extinto, y muérase todo aquél que no esté de acuerdo con algo de lo que yo haya dicho.
Addio.