Enero 04, 2004
Flipevolución
Una noche intensa. Una noche jalonada de oportunidades para crecer. De oportunidades aprovechadas. Miradas a los ojos. Noche de mi bautizo tech-house en la cual Coppelia cerró sus puertas a mi señal. Noche tras la cual mis piernas se resienten por causa del frenético tatatatata y los afilados y sincopados sonidos electrónicos. La amistad, la cual bien es sabido que da una de cal y otra de arena, se abrió paso para superarse una vez más. Noche tras noche. Noche de emociones incontenidas. Noche tras la cual siento mi mirada más alta que la mirada de ayer. Una noche para hacerme más hombre. Para aprender a vivir sin miedo. Para hacerse un sólo cuerpo con el carpe diem. Una noche de evolución. La evolución latente de Flipe. Esa ineludible metamorfosis darwiniana. Hoy he crecido. Hoy he subido un importante peldaño. Hoy evolucioné. El camino va siendo recorrido. Poco a poco. Paso a paso. Guiémonos por el buen camino. Y que ese camino se halle bien lejos de la extinción...