O de como un hidalgo caballero deshizo su entuerto.
La escena reconstruye un pasillo lúgubre, con alumbrado blanco típico de sala de autopsias, y olor a desinfectante. Aparece el protagonista, empapado en sudor, con la cara colorada y los ojos inyectados en sangre. Abre la puerta del departamento correspondiente, que emite un gruñido.
Yo: Hola, venia buscando al profesor XXX YYY ZZZ.
Secretaría: No está.
Yo: ¿Y donde podría encontrarle?
Secretaría: No lo sé.
Yo: Pero... ¿está ya de vacaciones?
Secretaría: Ni idea.
Yo: ¿Usted trabaja aquí?
Secretaría: Sí sinior. ¡Tengo papeles!.
El protagonista decide salir a fuera para montar lo que será su nuevo hogar y el camping-gas en el pasillo, para amenizar la espera del profesor. Mientras clava los vientos de la tienda, el profesor hace su aparición, rodeado por un halo de entropía, y entra en el departamento. Tras el shock inicial del protagonista, que no esperaba verlo hasta el equinoccio de otoño, sigue sus pasos y entra en el departamento. Le lanza una mirada asesina a Secretaría, tira –sin querer- un bote de Hexano con muy mala pinta y se adentra en el despacho del ilustrísimo catedrático tras un breve toque en la puerta.
Yo: Hola, yo es que vine la semana pasada y usted no estaba, y vuelvo a venir ahora para solucionar unos asuntillos -y le lanza una mirada que ni Don Corleone-.
Profesor: ¿Y cual es tu problema?
Alter ego: Soy miope, desagradable y la tengo ligeramente desviada hacia la izquierda.
Yo: CALLA! Digo... Pues que en las listas provisionales estoy aprobado, pero en las definitivas aparezco como no presentado.
Profesor: Ajá, entonces te abro una diligencia y ya está.
Alter ego: La cabeza de melón que tienes te voy a abrir yo, rectifícalo y rapidito, que después os vais todos a Benidorm a enseñar vuestras lorzas a la humanidad, y nadie podrá abrir mariconadas de esas.
Yo: Como usted vea.
Profesor: Ea, pues ya está. En cuanto la secretaria actualice las actas, constarás como aprobado.
Yo: DIOS...
Bueno, al menos no te han dicho que repitas el examen jeje.
Saludetes y felicidades por el aprobado.
Ah, me suspendieron el examen de conducir. Normal porque fui al examen con lo que había estudiado en el mes de enero... me dio pereza estudiar la semana anterior al examen.
Pero estoy contento de haber hecho el examen porque la verdad es que lo tenía mitificado y creo que si estudio un poco -bastante- me lo puedo sacar más fácilmente de lo que creía. Ya se verá.