El pasado viernes 1 de abril nos dejó el catedrático y profesor Antonio Lara García que, entre otras muchísimas cosas, era un amante de los cómics y toda una institución al respecto en la facultad de Ciencias de la Información de la Complutense en particular y en el mundillo del tebeo en general. Nació el mismo día que se publicó la primera tira de su adorado Rip Kirby de Alex Raymond. Su tesis doctoral, presentada en 1965, versó sobre "El guerrero del antifaz" y su proyecto de fin de carrera en audiovisuales se tituló "La amante estelar", película en la cual mezcló dos grandes géneros normalmente olvidados por la masa ilustrada, el cómic y la ciencia ficción. Ese fue el germen de su futura lucha ya que, desde entonces, escribiría y enseñaría sobre el apasionante mundo del tebeo y su reconocimiento en el entorno académico y social.
Para ello, ideó e impulsó el fanzine y revista Bang!! a finales de los sesenta. Dio a luz el ensayo titulado El apasionante mundo del tebeo, texto sobre la estética y la Historieta que debe ser recordado con mayúsculas dados los tiempos que corrían; aquellos prometedores tiempos, cuando los culturetas más progres se regocijaban en los saberes prohibidos hasta la fecha pero, menospreciaban el mundo del cómic por considerarlo un arte menor. 1969 fue el año en el que realizó La Exposición de la historieta organizada desde la escuela Oficial de Cinematografía en la 2ª semana del festival de cine fantástico de Sitges. En los setenta y desde las páginas del diario El País, continuó con sus secciones en torno a la cultura popular combinada con lo mediático. Durante 1985 fue el responsable de que en RNE existiera un programa cuyo nombre fue Tebeos, Historietas, Comics ¿Adivinais de que iba? Conservó durante los noventa los lazos con editoriales y publicaciones que buscaron sus colaboraciones. Y en 1997 fue designado por el ministerio de educación y cultura como comisario de la exposición titulada Tebeos, los primeros cien años, en la Biblioteca Nacional.
Menos conocida era su faceta como director de cine. Dirigió dos películas tituladas Entre la memoria y el sueño en 1969 y Más allá del tiempo en 1970.
En nuestra facultad introdujo el mundo del cómic de la mano de una asignatura cuyo título despistaba un poco, Historia de las narraciones gráficas. Impartía también seminarios de doctorado para proporcionar un conocimiento suficientemente sólido a los estudiantes de esta santa casa en el campo del tebeo, además de organizar y asistir como conferenciante a numerosos cursos de El Escorial durante los últimos veranos.
Qué decir de sus clases eran un sueño de coleccionista hecho carne, un viaje al pasado del mundo de la historieta de la mano de un amante del género. No se podía pedir más.
Su adoración por Alex Raymond y el apabullante conocimiento de su obra ha quedado sin verse traducido en forma de libro o historieta. Pero la pasión con la que hablaba del pasado del cómic difícilmente va a poder ser olvidada. Al igual que su huella entre compañeros, alumnos y espectadores. Descanse en paz profesor Lara.