Como diría un cubano, "soy un huevón".
Mira que terminé roto la semana pasada... y mira que me dije a mí mismo que esta semana estaría en plan relax...
Nasti de plasti.
He dormido unas seis horas todos los días. He ido a cenar con una amiga, he quedado con Mónica, he ido al cine con unos colegas y anoche estuve de cañas. Ni un solo día llegué a mi cama antes de medianoche.
Además, durante el día he sacado curro, en la misma cantidad que me ha llegado nuevas tareas, así que estoy en las mismas. Bueno, en las mismas exactamente no, porque me he comprometido a un par de proyectos de Cruz Roja y del propio curro.
Si es que nunca aprenderé. Cuanto más tiempo tengo, menos descanso.
Esta noche quedé para cenar con Mónica, y luego me iré con ella y unos colegas del curro a ver Troya, en la última sesión claro (de paso, la presento en "sociedad"). Mañana cena again y el domingo quedé con otros colegas.
Así no hay quien duerma... Me llegan las ojeras al ombligo. Ni siquiera el móvil me aguanta el ritmo (se acaba de quedar sin batería).
Aunque, sinceramente... ojalá todos los problemas que tuviera uno fueran así. A fin de cuentas, se trata de vivir, ¿no?
Escrito por Uesugi Kenshin a las Mayo 14, 2004 05:53 PM