Qué poco glamour tiene librar el día del fin del mundo... casi tan poco como volverse en bus a casa después de dar un conciertazo en una de las salas más chulas de Madrid al que no ha ido tanta gente como esperabas.
Me levanto tarde y, de repente, caigo en que hoy es el tan ansiado día. El Día de la Bestia (uuuuh...). Yo que queréis que os diga, este tipo de tradiciones cristianas me importan tanto como creo que deberían importarle a los propios cristianos. Que si pasar por debajo de una escalera, que si el gato negro que se cruza... no me veo yo al amigo de los cuernos primero teniendo cuernos y segundo subiendo aquí a atemorizarnos y decirnos que nos va a comer las calandracas. Para eso ya tenemos a Mª Teresa Campos y a don W.
En fin, tranquilos todas, que no parece que el cielo se vaya a abrir y todos los arcángeles del paraiso vayan a caer en picado llorando sangre y desplumados por la fuerza maligna de los cienes y cienes de seres obscuros (como mola esta palabra con la b) que con sus retorcidas (y obscuras también, también obscuras y también con b) intenciones para con la humanidad hagan que el mismo santísimo se quite la vida abandonándonos a nuestra merced por segunda vez (bueno, la segunda para los cristianos, los judíos no sé cómo siguen con la esperanza de mesías detrás de la oreja, los pobres).
Vamos, que a mí lo que me importa es cómo me duelen los hombros, que me lo tengo que hacer mirar. Si mañana seguimos por aquí, bien. Si no, que tengáis un buen Apocalipsis.
Abrazos per tutti!
Una idea (poco) original que BoZ tuvo a eso de las Junio 6, 2006 12:04 PMTu quoque fili!!!???
Esto lo dejó caer por aquí the thief más menos a las Junio 6, 2006 02:51 PMMi no comprende...
Esto lo dejó caer por aquí BoZ más menos a las Junio 6, 2006 03:18 PMla verdad que estaba de examenes pero ni me habia enterado de dónde tocabas y he estado en el centro las últimas semanas
:-p