Pues hoy os voy a contar algo que he recordado leyendo este post de The Thief. Esta es una aventurilla que me pasó hace un año más o menos y que es algo que me alegro de contaros, ya que casi nunca cuento historias personales y creo que os mereceis por lo menos una. El caso es que después de lo que ocurrio aquel día, esta aventura pasó a denominarse LA DE LA BOSNIA.
Era final de Verano y mi compañero de piso de por aquel entonces volvía de Barcelona después de las vacaciones y decidimos salir todos juntos (con mi otra compañera de piso, también de Barna) a pillarnos una taja del 15. La misión estaba cumplida antes de empezar, porque en estos casos la intención es lo que cuenta. Encaminamos nuestros pasos al Knaack Club, garito de hardcore bestia y metal del bueno donde siempre hay alguna que otra alternativilla que quita el hipo. No hay que decir que esto ocurrió poco antes de empezar a salir con Saartje. El tema es que llegamos allí y de aperitivo nos metimos tres Southern Comfort cada uno, acompañados de la cerveza que te dan a la entrada y no se cuantas dosis más de alcohol de alto octanaje. El que haya probado el Southern sabrá que con un par de ellos ya vas entonado. Imaginaos la magnitud del tajón. Pedo padre.
La idea que a mi compañero de piso y a mi se nos ocurrió mientras nuestra compañera se ligaba a un tio más feo que pegarle a un padre era la siguiente. Eramos vampiros españoles y vagabamos por el mundo desde hacía 400 años, satisfaciendo nuestra sed de sangre con bellos ejemplares de la raza humana. El caso es que empezamos a atacar a todo lo que se nos ponia por delante hasta que dimos con una bosnia y una amiga suya alemana. Mi colega se entretuvo con la alemana mientras yo platicaba sobre vidas y lugares pasados con la bosnia, por supuesto manteniendo en todo momento mi condición de vampiro. Jurando y perjurando que si se lo hacía conmigo jamás volvería a ser la misma.
Mientras todo esto ocurría, yo seguia bebiendo y bebiendo hasta que doblé. Lo único (o lo último) que recuerdo es que me estuve dando el palo con la bosnia y que salimos del garito juntos. La siguiente imagen que retiene mi cabeza es mi compañero de piso entrando en mi habitación preocupado por mi estado. Yo le dije que estaba bien, que por que se preocupaba. El tio me dijo que acababa de llegar, que nuestra compañera no estaba y que la puerta de la casa estaba abierta. Yo me alarmé, mucho más cuando vi el estado de mi habitación. Todo revuelto, ropa por el suelo y un desorden impropio de un freak de la limpieza como yo. Empezamos a revisar que no faltara nada y comprobamos que todo estaba en orden. Eso sí, ni rastro de la bosnia. Mi abrigo lleno de barro y hojas, pero de la bosnia nada. Mi compañero de piso me consoló ensañandome unas fotitos que sacó de ella con la cámara digital para mostrarme que la bosnia estaba (y creedme que lo estaba) como un queso de Burgos.
Al cabo de un par de meses me volví a encontrar con la bosnia (muy buen rollo, por cierto) y le pedí que me perdonara, pero que por favor me recordara que pasó aquella noche, porque estaba tan cocido que no recordaba nada. La tía se echó a reir y el diálogo fue algo así:
- ¿No te acuerdas de nada?
- No, tía. Lo siento.
- ¿Pero nada de nada?
- Nada de nada. Laguna absoluta.
- ¿No te acuerdas de lo del parque?
- No... pero creo que por eso mi abrigo estaba lleno de barro y hojas.
- Si, si... jajajajaja!
- ¿A que viene esa risita...?
Bueno, el caso es que hicimos guarreridas diversas en medio del parque a eso de las 7 de la mañana, después nos fuimos a mi piso y después de vomitar unas cuantas veces, fui capaz de hacer otras tantas guarreridas (parece que realmente unas cuantas) con ella hasta que, desfallecido, me quedé dormido y ella, después de partirse el culo de mí, se piró. El desorden de mi cuarto se debía a que yo casi me desvalijo a mí mismo buscando los condones y a que me quité la ropa a velocidad absurda, ansioso de sabores bosnios, tirando un flexo y un par de cosas más.
En fin, que es por cosas como ésta por lo que no he probado una gota de alcohol en un año y bien contento que estoy de ser capaz de recordar cada instante de mi vida. Espero que alguno aprenda que las drogas no son buenas y que el alcohol es una de ellas. Espero que algun otro me mande a tomar por culo y siga despiporrando big time, que es lo que tiene que hacer uno cuando mamá está lejos y se disfruta de la libertad.
Abrazos per tutti!
Una idea (poco) original que BoZ tuvo a eso de las Agosto 29, 2004 08:36 PMPoci la verdad es q el alcohol no creo q sea mu weno... donde esté la cocacola...
Esto lo dejó caer por aquí gorkamorka más menos a las Agosto 30, 2004 06:20 AMhahahahahah!!
casi me echan de la biblioteca en la que estoy por reirme por lo de los condones...
que bueno!
chicos, viva el alcohol, sin el no habria aventuras como estas, y no se tu, pero sin alcohol yo no le habria entrado a la bosnia ni a nadie... no digo que sea un requisito fundamental, pero a veces alegra y entona la noches...
A mi lo que me pasaba con el alcohol es que les entraba a las tias pero en plan totalmente irrespetuoso y casi para reirme de ellas. Es por esto que ahora soy un hombre nuevo, enamorado de y respetuoso con el genero opuesto. Antes tenía mas variedad y muchísima cantidad. Ahora prefiero la calidad de la que disfruto. A Saartje no la cambio por ninguna de las anteriores.
Y ahora cantais el "qué bonito" y cosas de esas, por favor.
Esto lo dejó caer por aquí Boz más menos a las Agosto 30, 2004 05:19 PM... fijo que tu pareja lee este blog... ja!
Esto lo dejó caer por aquí e-ninho más menos a las Septiembre 12, 2004 03:36 PM