Mi tía.
Una mujer a la que la vida le ha jugado una muy mala pasada.
Ella estudió magisterio: se sacó su plaza fija.
En la facultad conoció a su futuro marido. Se casaron. Se casaron dos veces.
Una por el juzgado y otra por la Iglesia.
Todo el mundo decía: ¡que enamorados están, míralos, se casan dos veces, cuanto se quieren!. Y yo murmuraba por lo bajo: "el querer no se demuestra casándose dos veces, incluso sin casarse se puede demostrar el amor, hay mil maneras y formas de hacerlo".
Efectivamente, a los 6 meses de casarse por la Iglesia mi tía pilló en la cama a su querido marido con una mujer de pechos grandes y culo gordo.
Mi tía cayó en una depresión. No comía. No dormía.
Se encerró en casa. No salía a la calle.
Tenía una casa de tres plantas, pues bien, se instaló en el sótano.
Lo acondicionó, lo puso muy acogedor. Podía pasar por un pequeño apartamento.
¿Porque vives aquí, en el sótano, tita?
-Porque la casa huele demasiado a él -me respondió-.
Su depresión continuó. Convencí a mi madre de que la llevásemos a un médico. Fuimos.
El médico le recetó pastillas.
Quiso suicidarse tomándose todas las pastillas en una misma tarde.
La encontramos medio moribunda en el sofá nombrándole.
La llevamos a Urgencias, allí le sacaron toda la mierda que se había metido.
Yo pedí que le sacasen el amor que sentía por ese hombre sin nombre.
Allí me dijeron que eso tenía que soltarlo ella, con el tiempo.
Volvimos a casa, y desde entonces allí sigue. Encerrada.
Ahora pesa cerca de 150 kg. Va del sofá a la cama, de la cama a la ducha, de la ducha a la cocina. Sigue en el sótano. Allí lo tiene todo. Incluso una pequeña ducha.
Tiene dos pagas. Dos pagas que cada mes cobra y guarda en un cajón.
Gana un pastón. Y mi familia cuando va a verla es por su dinero.
Ella no sabe comprar con euros: 100 euros para ella, son como mil pesetas.
Un día me dijo, ofreciéndome un billete de 200 Euros: toma, dos mil pesetas.
Por supuesto, no lo acepté.
Ella bebe vino tinto. Le ayuda a afrontar su soledad y su depresión.
Cuando yo tenía el Bar, le llevaba vino por cajas. Vino tinto.
Ella era feliz con el vino. Así yo controlaba lo que se bebía. Así no la engañarían más en el supermercado.
Hace poco me di cuenta (hasta los vecinos me lo comentaron) que el dinero le volaba. Y es que en el supermercado le cobraban de más, como 30 veces más la compra.
Y ella, no se daba cuenta, y pagaba sin rechistar.
Hoy se cumplían 6 meses sin verla. Desde que mi madre y yo no mantenemos relación alguna, no la veía.
No quería ir a su casa, que me preguntase por mi madre y no saber que contestarle.
Mi madre no se portó del todo bien con ella. Cuando más la necesitó mi madre no estuvo ahí.
Si yo iba a ver a mi tía no era por el dinero. De hecho ahora no ando nada bien de dinero, y sería fácil ir a verla, pedirle mil euros y tenerlos en 0,2. Pero no voy a ir. No quiero su dinero. Prefiero que lo mantenga en el cajón.
Prefiero que vayan otros familiares y se lo roben.
No quiero ser yo quien me ensucie las manos con dinero de mi tía.
Porque se que mi tía no me haría eso a mi. No me robaría.
Hoy la he visto en la calle. Ella no me conoce. Porque como he dicho, no anda bien de la cabeza, y a veces hasta que no te mira durante un buen rato no te conoce. La he visto mirando un escaparate.
Me he alegrado: ya sale a la calle, es un gran paso.
Yo conseguí, antes de perder la relación que saliese a regar las plantas del jardín.
Ella tenía pánico de enfrentarse con la gente: los creía a todos iguales que su ex-marido. Aquel cabrón que le destrozó la vida.
Hoy la he visto, ha perdido algo de peso.
No he dudado en echarle una foto....sin sacar su cara, pues se que a ella le daría pánico si se enterase de que la he publicado en Internet.
Una vez recuerdo que le dije: Tita tengo un blog.
Y ella me dijo: ¿qué tienes qué? ¡¡A ver si empiezas a pronunciar bien hija mía!!
Contuve la risa y me fui. Fue la última vez que hablé con ella.
Se que me echa de menos. Algún día le haré una visita.
llevo un rato paseando por tu blog. y me encanta! de verdad. es una pasada! yo tngo un fotolog... y cmo intento q no sea tan privado no cuento cosas como estas, pero me ha gustado mucho la historia de mi tia. me ha recordado a mi abuela con lo de los euros. pobrecillas! XDD
perdoname porfavor por meterme, pero me ha sabido mal (sin saber absolutamnte nada de la historia) leer q no t hablas con tu madre. yo perdí a la mia (t lo he escrito en el blog del cancer) y siento q es una oportunidad perdida el tenerla y no hablaros.
bueno.. sea lo q sea, espero q algun dia podais charlar y arreglarlo (ojala!).
si me permites te mando un beso, y una visita de vez en cuando para leer tus cosillas!
Escrito por: Yo misma, el Sábado, 14 de Abril de 2007 a las 10 PMGratis 2 entradas para en Gran Premio de España Telefonica de Formula 1
http://baratillos.blogspot.com