A aquella mujer la miraban con deseo. Querian tirarsela, o eso decían.
Ellos afinaban su punteria con idioteces q le dañaban las entrañas. Y ella no hablaba.
-Te comería entera, te la metería hasta el fondo, te follaría.
Mientras, la gente andaba sigilosamente x aquel salon.
La mujer de piernas hermosas, seguía sin hablar. Excitando hasta al mayordomo, q tenia q andar con las piernas medio cruzadas.
La mirada de aquella mujer, persuadia a toda la sala.
Los hombres la deseaban. Se acercaban a ella. Le ofrecian caviar, buen vino. Pero aquella mujer conseguía quitarse a aquellos obsesos sexuales empalmados, de encima. Y lo conseguía. Ya te digo si lo conseguía.
Sin embargo, allí estaba él. Sentado en el lugar más apartado de la sala, con un cubata en la mano, con mucho hielo, para helarse el alma de golpe.
Ella se acercó a él, y extendió su mano hasta rozarle el hombro.
El la miró. Le sonrió.
Como era posible q una mujer tan bella, le eligiese a él, q tan ausente de la fiesta estaba. Q del poco ruído q hacía, parecia no existir en aquel sitio.
La mujer, se colocó de forma q tenía su cara, ahora, justo enfrente. Se quitó las gafas oscuras, y miro al chico, fijamente a los ojos.
Se acercó a su boca, poco a poco, hasta sellarle los labios con un dulce beso.
El chico, si hablar, se levantó de la silla.
Se quitó la chaqueta.
Y ella.... se quedó boquiabierta, al ver, como se dibujaban unos pechos debajo de la camisa beig, q llevaba.
Él, q ahora era ella, dejo la chqueta sobre la silla, se acercó al oído de la mujer:
-Y ahora..¿me quieres seguir besando?.
La mujer tímidamete, respondió:
(ahora tú eres la mujer, haz un comentario, con lo que tu habrías respondido, en caso de ser esa mujer, es un juego, así q juega si quieres)...
Aunque de igual te lo dijo eigual a las 11:34 PM- Lo que me llevó a tí fueron tus ojos, candiles en esta estancia obscura, a través de los cuales vislumbré tu alma. Si me dejas, no sólo te besaré esta noche, sino la vida entera que quieras gastar conmigo.
Y ante la mirada atónita del salón, se volvieron a besar con la pasión y ternura que saben hacerlos dos mujeres de esa talla, apagando con ese ósculo no sólo la sed acumulada de ambas, sino los comentarios e impertinencias anteriores...
(Si es por imaginar que no falte, ya sabes que mi imaginación es enorme... Si se me ocurre otra respuesta la añado, vale? Besos varios guapa, pero esta vez castos y puros).