1 de mAYO
iNTERVENCIÓN DE FIDEL EN LA HABANA
Estos bandidos que nos acusan de violar los derechos humanos, acotó, no se atreverían a decir allí que Cuba es el único país del mundo en el que no existe un solo desaparecido ni torturado a lo largo de 45 años de Revolución, donde no han existido jamás escuadrones de la muerte ni ejecuciones extrajudiciales.
En ese sentido apuntó que no se trata de exageraciones sino de exponer las realidades, avaladas por un pueblo con un alto nivel de cultura y de conciencia política.
Ante más de un millón de habaneros e invitados de 55 naciones, el Presidente cubano se refirió a los programas de cooperación y solidaridad en materia de salud con otros países, y en especial con Venezuela.
Afirmó que Venezuela en breve tiempo estará aplicando programas de Educación que llevarán a ese pueblo luchador y heroico por donde empezó la lucha de independencia de América, a niveles similares a los de Cuba.
El líder cubano señaló que acusan a un país que ocupa el primer lugar del mundo en materia de educación y cuya mortalidad infantil, a pesar del bloqueo y de obstáculos impuestos para obtener medicamentos, equipos y tecnologías, es menor que la de Estados Unidos.
Si se analizan los millones de niños que, pudiendo salvarse, mueren cada año en los países del Tercer Mundo, en esos que votaron contra Cuba en Ginebra, es posible afirmar que sobre la Tierra se comete cada año un genocidio comparado con las dos guerras mundiales, reflexionó.
El sistema imperialista y sus formas actuales son lo más irreconciliable con una noción honesta, sincera y objetiva de los derechos humanos y valdría la pena preguntar a Estados Unidos y sus aliados de Europa con cuántas naciones subdesarrolladas han colaborado.
Al abundar en la situación internacional, el Presidente cubano la consideró compleja. La política aventurera de la actual administración norteamericana ha conducido al mundo a problemas cada vez más insolubles. El orden económico impuesto es cada vez más insostenible, aseveró.
Por eso, no es de extrañar que en cualquier parte ocurran movimientos sociales, como aconteció recientemente con las elecciones en España, donde tuvo lugar un hecho grandioso y estimulante, obra extraordinaria y casi exclusiva de ese pueblo, en especial de sus jóvenes, expresó.
Su heroica batalla política, en vísperas de las elecciones, asestó un demoledor golpe a la pérfida maniobra del anterior gobierno español para manipular a su favor y en el de los intereses belicistas de la administración de Bush la horrible acción del 11 de marzo.
El actual gobierno español ha cumplido su promesa de retirar sus tropas de Iraq, una actitud loable, pero ahora tiene el deber moral de luchar por el regreso definitivo a su patria de los jóvenes latinoamericanos enviados a ese país por gestiones del anterior gabinete.
Los pueblos del mundo, entre ellos Cuba, no odian al pueblo norteamericano ni desean la muerte de soldados estadounidenses, muchos de ellos negros, mestizos, latinoamericanos, a los que la pobreza y el desempleo llevaron al oficio de las armas y son víctimas de una guerra innecesaria y estúpida, dijo.
Millones de personas han tomado conciencia de que se trata de una guerra de conquista, en la que fueron violadas las normas internacionales y desacatadas la autoridad y las prerrogativas de las Naciones Unidas.
El pueblo de Iraq lucha hoy por independencia y sus legítimos derechos, reafirmó.
Explicó Fidel que el gobierno de Estados Unidos enfrenta, por tanto, una complicada situación en Iraq, pues quiso seguir la línea de la violencia y la política guerrerista, y recordó sus palabras el propio 11 de septiembre del 2001, en las que llamó a la paz y la cooperación internacional.
En ese tipo de guerra todo el arsenal de una superpotencia sobra, subrayó el líder cubano, quien reiteró la idea de que se puede conquistar un país, pero no administrarlo.
Afirmó que resultó sorprendente que hace apenas dos días fueran retiradas las tropas estadounidense de la ciudad de Fallujah, y en ese sentido instó a Estados Unidos a la retirada total de Iraq y devolverle a esa nación su plena independencia, lo cual tendría, dijo, el apoyo internacional.
La continuidad de la lucha decidida del pueblo cubano fue también ratificada por Fidel, quien destacó que esa es la respuesta frente a quienes se dan el lujo de preconizar hechos políticos basándose en la desaparición física de algunos de sus líderes.
Ahora se desgañitan, denunció, con próximas medidas para afectar la economía y desestabilizar al país, pero más valdría, destacó, que devolvieran a los Cinco Héroes cubanos, quienes soportan con dignidad el más grande caso de violación de los derechos humanos, en cárceles en las que están totalmente aislados.
Ante la inmensa multitud reunida en la Plaza de la Revolución José Martí, reclamó serenidad, sensatez, cordura y más inteligencia a los gobernantes de Estados Unidos frente a su persistencia en destruir a la Revolución cubana.
Y finalizó exclamando ¡Viva el Socialismo