¿Y mi medio pomelo?
¿Porqué todos buscamos algo diferente? En cada uno de nosotros, todos tan distintos y con diversos tipos de vida social y de amigos, hay una cosa en común: a pesar de que tengamos una vida sentimental más o menos estable (en mi caso es una sequía demasiado estable), todos nos sentimos en el fondo insatisfechos y, ya seamos hombres o mujeres, siempre nos preguntamos donde podremos llegar a conocer a esa persona ideal, esa media naranja perfecta con la que todos idealizamos en algún momento de melancolía. Lo cierto es que seamos cómo seamos, el chico ideal con el que todas las mujeres sueñan es curiosamente estereotípico; claro está que la mujer ideal con la que sueñan todos los hombres es, asimismo, y salvo algunas excepciones fruto de una morbosa imaginación, idéntica en su forma.
No voy a intentar adentrarme en la siempre tan compleja mente femenina para desgranar cual sería el hombre perfecto que todas las mujeres desean, pero sí que puedo, en cuanto que soy hombre, dar mi opinión sobre lo que los hombres consideramos el séptimo cielo en materia de medias naranjas.
La chica con la que yo por lo menos he siempre soñado en mis ratos libres y durante alguna que otra clase de religión es siempre muy parecida, aunque a veces introduzca modificaciones, ya que también los sueños se tienen que ir adaptando a los tiempos. Un ser angelical, perfumado y con una embriagadora y femenina voz que, como la de las sirenas, le llevan a uno en volandas a dimensiones paralelas donde la psicodelia onírica es la norma (tal vez me he pasao). Concretando un poco más, y citando sólo el aspecto puramente visual de semejante ser ultraoceánico, mi chica perfecta es siempre morena (a lo mejor otro día explicaré porqué), estatura media, belleza sin par (belleza que pocos elegidos como yo saben apreciar, lo cual es bueno porque disminuye la competencia), ojos expresivos (y, si puede ser, verdes), y unas líneas más o menos estilizadas y elegantes, discretas, que encierran un volumen corporal estándar, que no estoy yo como para soportar pesos pesados. La parte espiritual e interior de la criatura la describiré en otro tratado, dada su profundidad y extensión.
[Este relato va dedicado a prox que me lo ha corregido ortográficamente con esmero y dedicación. >:P]
Pues yo los prefiero morenos pero con ojos negros. Los de ojos verdes, por eso de ser más llamativos, siempre acaban distrayendome de la labor de leer en el interior.
Bonito diseño el vuestro.
Joe, es justo lo que yo NO quiero en un tío, juas juas! Bueno, lo de la belleza, claro que quiero que esté bien... y también me gustan morenos. Pero sobre el resto, me gusta más la mirada que los ojos en sí, y con que se haya duchado y lleve desodorante me conformo, no soy muy especialito para los perfumes. Lo de las líneas estilizadas y la voz femenina; eso sí que NO. :)
Pues te ha faltado ponerle el arpa a la angelita para describirla.
No voy a dar a nadie la satisfacción de confirmar lo que todo el mundo piensa sobre los deseos femeninos hacia un hombre (amor, respeto, complicidad...) porque eso es aplicable al mundo mundial independientemente del sexo.
Como ideal, me gustan los hombres grandes, o altos. Morenos más que rubios y fuertes (aunque no musculocas).
Me encanta la fortaleza genética y no machacada.
Bien preparadito en lo demás (pies, manos...ejem...) y con cara expresiva: ojos con fuerza, mandíbula marcada, morritos sugerentes... en fin, y podría seguiiiir, y seguiiir, pero básicamente es esto.
yo pienso que de vedad lo que todos queremos es alguien que no sea dificil de mirar y que en el interior sea exacto a nosotrosmismos, de ahi los continuos fracasos, y las impresiones que te llevas cuando un amigo se casa con una mujer totalmente diferente en aspecto exterior al que el decia que le gustaba.
Una morena de ojos verdes, sí señor, comparto tus gustos.
Sin embargo, como dice cedrik, al final tantas desilusiones, y tanta insatisfacción yo creo que está en la tremendísima dificultad de encontrar la mujer adecuada por fuera... y por dentro.
Tú y yo sabemos de sobra que una buena mujer por fuera... puede ser un infierno por dentro... ¿Me equivoco?
Como las mujeres entran primero por la vista, yo creo que esto se traduce a efectos prácticos en:
1-Esa preciosidad te acaba volviendo loco al cabo de unos meses saliendo con ella.
2-Esa amiga en la que nunca pensaste mientras te *(censurado)* comienza a meterse poco a poco en tus pensamientos.
Ummm... os voy a contar un secreto. Me ponen los calvos con gafas. Y hablo en serio. Y si recordamos mi affaire platónico con Peter McNicol (bizcochito o John en Ally McBeal)... creo que soy un monstruo!
Qué peligro tienen los sueños!!
Si no la encuentras, olvidalo y pierdete en los ojos que tengas al lado...verde, azules, marrones, negros....
tengo nuevo blog ... me faltan los cuadros y matar algunas arañas pero se puede visitar! ... http://cecica.nextperu.com/
Jijiji,¡que buen gusto tienes madre! si es que donde estemos las serpientes morenas, que se quiten las que tienen un look sueco.
:)