1.- De camino a casa encuentras un paso de peatones señalizado con un semáforo en rojo. Te detienes pero un tipo, con evidentes síntomas de embriaguez, te increpa para que cruces argumentando a gritos que "nonnn passssssa na-hip-naide". ¿Como actuas?
a) Espero a que el semaforo este en verde y disimulo no haber escuchado al borracho, a pesar que gira a mi alrededor dándome voces.
b) Cruzo, con tal de evitarle, arriesgándome a que me atropelle algún veículo.
c) Espero y además mando a tomar por el culo al mamao que me grita, a sabiendas que se le puede ir la pinza y darme una ostia (o un navajazo, o un tiro, ...)
2.- Saliendo del trabajo, te encuentras en la misma esquina, al mismo caradura que te pide un cigarro todos los días y que además ha visto como te encendías uno. Tú ...
a) Se lo das, como siempre y ni te da las gracias. Además, le ofreces fuego.
b) Le dices que era el último, y como ha visto el paquete, avanzas hasta la papelera más próxima fingiendo tirarlo, aunque en realidad lo guardas disimuladamente en el bolsillo.
c) Cansad@ de lo mismo le contestas con un "NO" seco y sigues tu camino. Mientras te pone de vuelta y media llamandote rata, tacan@, agrrad@, usurer@, judí@,... dejándote en evidencia ante los transeuntes.
3.- Son las cinco y media de la mañana del domingo. Después de tomar unas cuantas copas, te vas a casa. De camino, por una calle desierta, te percatas de que alguien sigue tus pasos. ¿Qué haces?
a) Pienso que simplemente nos dirigimos a la misma zona.
b) Creo que no pretende nada bueno y salgo corriendo intentando darle quiebro. En mi intento de escapar acabo metiéndome por calles oscuras, laberínticas y más desiertas aún.
c) Estoy segur@ que quiere hacerme daño y paro el primer coche que pasa poniéndome en medio de la carretera. Pido ayuda y me monto en un auto cuyos ocupantes vienen de despedida de solter@.
Soluciones:
- Mayoría de A:
Eres una persona muy confiada y con muuuuuucha paciencia. Esto puede causar que la peña te manipule y que se aproveche de ti.
Por cierto, ¿me prestas 100 euros para el alquiler?
- Mayoría de B:
Eres especialista en escaqueos. Tendrás que perfeccionar tus tácticas porque sales de guatemala para meterte en guatepeor.
- Mayoría de C:
Si no te has pegado el vacile, será que tienes un buen par. Decidid@, osad@, pero a este ritmo tienes los días contados.
No se explicarlo.
Se que hay razones, aunque sean irracionales.
Se que conozco tu alma, y que solo tú conoces la mía.
Se que todo lo que busco lo encuentro en tus ojos.
Se que tu cuerpo significa deseo.
Se que junto a ti no conozco en miedo.
Se que no eres lo único, pero si lo primero.
Se que hay mucho más.
Y se lo que siento.
Se que te amo.
Pero no me preguntes, no se explicarlo.
A veces le recuerdo.
Nos conocimos en un viaje de estudios.
Teníamos, jajaja, 13 años.
Él era rubio y de ojos verdes, y a mi me gustaban los morenos.
Tenía soltura con todo el mundo, menos conmigo. También tenía una mirada inteligente.
Vivimos durante una semana en el mismo hotel.
La última noche, se arrodillo junto a mi silla y me susurro al oido si quería salir con él.
Pensé "¿a donde?", pero contesté "si"
Lloró cuando nos despedimos, me dio su dirección y me pidió un beso.
Se lo di, en la mejilla.
Le escribí a la semana siguiente.
Tardó un mes en contestar.
Me dibujó un corazón con nuestros nombres dentro y me escribió un enorme "TE QUIERO".
Pensé "dibuja bien, pero ¿está hablando de amor?"
Me asusté y nunca más le volví a escribir.
1.P:¿Cómo te llamas?
1.R:Ya lo sabes
2.P:¿Cómo te gustaría llamarte?
2.R:Nunca he pensado en tener otro nombre, me gusta el mío.
3.P:¿Dónde te gustaría estar en este momento y con quién?
3.R:A unos 25 metros a mi izquierda, con él (señalando con el dedo)
4.P:¿Qué es la amistad?
4.R:Ummmmm, un bien muy escaso. Pero si encuentras la verdadera en alguien, va a durar siempre.
5.P:¿Y el amor?
5.R:(Se me ríen los huesos) No se definirlo, pero se que lo siento, y ... que dure.
6.P:¿Qué esperas de los demás?
6.R:¿Qué espero? Espero a ver que hacen, a ver que dicen, a ver que pasa.
7.P:¿Qué ofreces a los demás?
7.R:Depende de lo que pidan
8.P:Dime tres defectos y una virtud
8.R:Ufff, defectossssss; terca, orgullosa y mal genio. Una virtud; mi diplomática sinceridad.
9.P:¿Qué es lo más importante para ti?
9.R:La gente a la que quiero
10.P:La muerte, ¿qué piensas sobre ella y como te gustaría que fuese la tuya?
10.R:Tengo pánico a la muerte de los que me rodean, de mi familia, de mis seres queridos.
Quiero morir antes que ellos, rápido y sin darme cuenta. Se que es egoísta.
Dirán que soy antipatriota (y no se equivocarían mucho) y además, desconsiderada con los animales (esto si que me fastidia). Pero es que, en la lucha entre partidarios y detractores de "nuestra" fiesta nacional, yo me siento imparcial.
Por un lado, considero que esta forma de espectáculo es dantesca y de mal gusto drisfrutarla. Comparable a la bestialidad de los espectáculos romanos, en los que se obligaba a gladiadores a luchar a muerte.
Pero más que el espectáculo en si, lo que me parece deleznable son las motivaciones que llevan a los aficcionados a llenar las plazas; sin los cuales la lidia no tendría razón de ser. Motivaciones que, ocultas tras la definición de "arte" que se le da al toreo, a mi no me parecen más que la aflozación de los más bajos y primarios instintos de los que se suponen seres racionales e inteligentes. Motivaciones que llevan a drisfrutar a las personas, de una lucha violenta, sanguinaria e injusta.
Pero, llegando a la conclusión de que la violencia es una necesidad instintiva de algunos seres humanos y que los instintos dificilmente son controlables, mejor dejar se desahoguen en los ruedos que en otros lares.
Por otro lado, y siendo consciente del horroroso sufrimiento y la vejación a la que es sometido el toro en la injusta lucha; el toro lucha y muere luchando.
Acaba también en la vitrina de alguna carnicería especializada; que está bien cotizada su carne.
Pero esto, tras haber vivido aproximádamente unos cinco años, pastando libremente por la finca, al sol y correteando, así como disfrutando de su condición de semental.
Y yo, poniendome en la piel del toro, prefiero esto, a la suerte de sus semenjantes; que viven encerrados durante dos o tres años, en su habitaculo de la granja, comiendo pienso hecho con vaya usted a saber que harinas, inyectados de sustancias para su más rápido engorde y viniendo a morir electrocutados en enormes bañeras.
Yo ya lo digo, ni de parte de unos ni de otros. Que no voy a los toros, pero si que me he comido la carne ( aunque bien podría pasar sin ella).
"Siempre que llegas a casa, me pillas en la cocina, embadurnada de harina y con las manos en la masa..."
Lo reconozco, soy una enganchada a los programas de cocina; desde que tengo televisión por cable, me paso horas viendo el Cana Cocina.
Aún así, dudo que alcance algún día a Ferrán Adriá.
El caso es, que el otro día, entre Sergi Arola y Koldo Royo, veo a una Elena Santoja en sus mejores años.
¡¡Estan reponiendo "Con las manos en la masa"!!
¿Cuanto hace de ese programa? ¿ Unos 15 años? Entonces yo era una canija.
Y como ha cambiado desde entonces la televisión, y en particular los programas de cocina.
Hoy las placas de inducción, las sartenes antiaderentes, los robot de cocina tipo termomix y los platos de nouvelle cuisine y cocina deconstructiva.
Antes los fogones, las sartenes de hierro y las cacerolas esmaltas rojas por fuera y azules con motitas por dentro, las varillas de batir y las... papas con arroz, bonito con tomate, cochifrito, caldereta, migas con chocolate, cebolleta en vinagreta,...