El problema de la mala hostia no es que se tenga un pronto en un momento dado, montes un Cristo que ríase usted de Kill Bill y luego te largues tan tranquilo a tomarte un café, mismamente. Pues no. Estamos muy equivocados. El problema de la mala hostia, es ese mal café traicionero que te asalta cuando algo pasa, de aquella cosa de la que pasas pero que cada vez que te acuerdas se te revuelven las tripas cual Ana Botella en una comedor benéfico. Pues ea. Esa cólera lenta, que te retumba en las sienes y que va creciendo y bullendo dentro, como el Avecrem, chup, chup. Pues mas me vale tenerla controladita, porque se me esta saltando la vena azul del cuello y eso puede ser, como decia Fabio Testi: “Troppo pericolosso” Pero vamos... contando hasta 10 y blasfemando en arameo hasta la próxima vez que te acuerdes, so pena de cargarte algo que realmente aprecies, se va controlando a duras penas.
En otro orden de cosas, que diría (y apreciese con notoriedad el diría...) Urdaci, hoy hemos tenido la ocasión de comprobar el comportamiento humano en su máximo....ehm... apogeo (mas que de Derecho, parecemos de Sociología) Total, que hoy teniamos una conferencia de Derecho Romano (in-te-re-san-ti-si-ma) Tras ver como después de veinte minutos de presentación del maginifico gachó que nos iba a dar la conferencia sobre el tema interesantísimo del Derecho Romano de Sucesión, subio al estrado un hombre regordete, algo asi como Ben y Hill. Y claro... tú esperas otra cosa, desde luego. Presentan a un tio que es la rehostia, pues esperas por lo menos a Kirk Douglas luchando a brazo partido contra los leones. Pues no. Meeeeec. Error. Pa que presentan tanto algo? Para que después el romanistico en cuestion lleve corbata? Por favor¡ Que falta de profesionalidad¡ Tenia razon Obelix. Estan locos estos romanos