Poco antes de la invasión de Irak, cuando aún USA intentaba invadir bajo el paraguas del Consejo de Seguridad, la ministro de educación de Alemania comparó a Bush con Hitler. Esta valiente mujer dijo lo que la mayoría de los estadistas de Europa pensaban y comentaban por lo bajo, pero que nadie se atrevió a decir. Por supuesto que mantener a la ministro en funciones equivalía a refrendar su opinión, así que se tuvo que ir. El desarrollo posterior de los acontecimientos parece haberle dado la razón.
La masacre de las fosas Ardeatinas en 1944 fue la respuesta nazi a un atentado, causado por la resistencia y que costó la vida a 32 soldados alemanes. Los nazis aplicaron la receta del 10 por 1 y fusilaron a 335 rehenes, judíos, presos por delitos comunes y políticos, y gente levantada al voleo. Priebke, un ex oficial alemán que tuvo intervención en la masacre y vivía en Bariloche, fue extraditado a pedido de Italia en 1995, donde lo juzgaron dos veces (en el primer juicio lo absolvieron) y lo condenaron a prisión perpetua.
En Fallujah los militares de USA aplicaron la misma receta. Al asesinato, en una emboscada de la resistencia, de cuatro americanos mercenarios empleados en la seguridad privada, han respondido con el bombardeo aéreo y de artillería de áreas residenciales, ocasionando alrededor 600 víctimas civiles.
Por supuesto, en su jerga infernal, eso se llama “daños colaterales”. Seguramente que es más fácil hacer eso que mandar la tropa a buscar a los resistentes. Después de un ablandamiento de ese tipo, hay menos bajas propias y la opinión pública de USA no se impacta con las bajas civiles irakíes. En algo andarían y seguramente todos eran terroristas.
Cuando J.P.XXIII, en su homilía de Pascua, condenaba al terrorismo, se refería también “in pectore” a los bombardeos de Fallujah?
La caída del principal argumento para la agresión, la posesión de armas de destrucción masiva, no parece haber influido en la opinión de los norteamericanos, que todavía siguen pensando mayoritariamente que la invasión aún se justifica. Todo un éxito de los medios de USA, que no reportean a los heridos ni filman la llegada de los “body bags”, los envases de plástico negro que traen cadáveres de vuelta, y que además dan curso libre a las historias rosa del Pentágono como el asunto de la “private Jessica Lynch”.
El Gauleiter Bremer ha logrado lo que parecía irrealizable: la unión de sunnitas y chiítas en la resistencia.
Las Naciones Unidas hace 30 años que están en Chipre, por el conflicto entre griegos y turcos, hace 8 años que la NATO está en Bosnia y como van las cosas la estadía en Irak de las tropas invasoras pinta para mucho, mucho tiempo.