Julio 27, 2004
Conservan un glaciar con una sombrilla (Noticia real)
Tratando de sobreponerme a la última e increíble puñalada que me ha dado mi estúpida empresa (cada día me cuesta más creer hasta qué punto es inhumana la gente) os traigo una nueva noticia verídica. Es otra vez de France Presse.
Sombrilla para salvar el último glaciar alemán
Con una gigantesca "sombrilla" de lonas y toldos blancos expertos alemanes intentarán detener el derretimiento del último glaciar de Alemania, situado cerca de la cumbre del Zugspitze, informaron autoridades de la estación de esquí de Garmisch-Partenkirchen en Baviera.
Toma tecnología alemana. Lo que no sé muy bien es para qué han necesitado recurrir a expertos. O a qué clase de expertos han recurrido. Porque la solución parece directamente sacada de Pepe Gotera y Otilio. Sin olvidar el dinero que se podría sacar si las sombrillas incluyeran publicidad.
La "sombrilla" será confeccionada con materiales que reflejan la luz solar y permiten refrescar la superficie de 6.000 metros cuadrados que ocupa el glaciar, impidiendo asimismo que caigan las cálidas lluvias estivales.
"En los lugares que protegemos con las lonas rescatamos anualmente entre dos y tres metros de nieve", dijo Stephanie Vogel, portavoz de la empresa de funiculares que lleva a esquiadores y turistas a las cumbres del Zugspitze, de 2.920 metros de altura.
Está bien. O sea que lo hacen en más sitios. Rescatan nieve. ¿En qué consiste exactamente eso? Pero ahora llega la parte que realmente justifica que es una solución dada por expertos, y que además hay que ser un experto muy experto para llegar a calcular lo siguiente.
En un sólo día de altas temperaturas veraniegas, el glaciar pierde alrededor de 10 centímetros. Proyectada esta reducción a los 960.000 metros cuadrados de su superficie, el volumen equivale a un tercio del consumo de agua de la ciudad de Munich, capital de Baviera.
Ahí están los números. A ver quién les discute ahora la cuestión. Pero teniendo en cuenta la región, ¿a qué proporción de consumo de cerveza de Munich equivale?
Al contrario que en otros países vecinos, en la región de Baviera, por regulaciones de protección del medio ambiente, no se permite la utilización de los denominados "cañones de nieve" para cubrir con un manto blanco los glaciares.
Pues eso. Imaginación al poder.
Julio 16, 2004
Subastan medio plátano por 2.500 euros (Noticia real)
Estoy últimamente un poco vago, lo sé. Y lo siento por el escaso público que me lee de vez en cuando. De todas formas, no será por falta de material. El mundo sigue igual de mal. Primero el balón de Beckham, ahora esto.
De nuevo gracias a France Presse, que fechó esta noticia en Londres el 13 de julio.
Subastan medio plátano en Gran Bretaña por 2.485 euros
Un plátano a medio comer y dedicado por la presentadora de televisión británica Kate Garraway fue comprado a través de una subasta por internet por 1.650 libras (2.485 euros).
Pues el kilo de plátano te sale por un ojo de la cara. A mí, la verdad, esto me parece una guarrería. Porque realmente no es medio plátano sino un plátano a medio comer. Que es parecido pero no es lo mismo.
Esta idea "un poco excéntrica", según los términos de Kate Garraway, presentadora de la cadena británica GMTV, se le ocurrió durante una discusión televisiva sobre los curiosos objetos subastados en el sitio www.ebay.co.uk.
Unas 30.000 personas quisieron adquirir el plátano entre el 4 y el 11 de julio, fecha en la que terminó la subasta, según las informaciones difundidas este martes.
Ufff. ¡30.000 personas! Hay capitales de provincia con menos habitantes. Esto dice muy poco de nuestra civilización. Tenemos que estar llegando al final del mundo tal como lo conocemos. ¿De verdad esta gente no conseguía imaginar algo mejor en lo que invertir toda esa pasta?
Pero claro, uno gasta su dinero en lo que más le apetece. Ojo al destino del plátano:
Jaime Falarczyk, la persona que adquirió el plátano, trabaja para una compañía de corretaje on-line. Anunció que el dinero ganado por eBay sería dedicado a obras de caridad. Explicó que el plátano, o lo que queda de él, será expuesto en la entrada de las oficinas donde trabaja, para dar al lugar un aspecto "más gracioso".
Más gracioso. Pues no sé. Yo debo tener un sentido del humor un poco retorcido. Pero no le acabo de ver la gracia. Los Simpson, sí. Mr. Bean, sí. La vida de Brian, sí. Una banana a medio comer, no.
Entras en una oficina y te encuentras medio plátano. Alguien se ha dejado el desayuno. Los de la limpieza están de huelga. Piensas cosas, pero no te ríes. O sí, no lo sé, igual es una de esas situaciones que hay que vivirlas. Pero con 2.500 euros seguro que podían hacer muchas más cosas que poner medio plátano. Que por cierto, si se van al supermercado de la esquina y fabrican el mordisco artesanalmente ellos mismos les sale como mucho por 15 céntimos. Mira qué ahorro.
Por lo menos la pasta es para una buena causa.
Julio 09, 2004
Conductor choca dos veces con la misma casa (Más noticias reales)
Jo. Es que le dan un carnet a cualquiera. Parece sacado de Rompetechos. O de Mr. Magoo. O de Topo Hans.
Pero por lo visto ha pasado de verdad. En Londres. O eso dicen los de, ¡sí!, France Presse. El 7 de julio, San Fermín, toma ya. Igual el conductor venía directo desde Pamplona.
El mismo conductor se estrella contra su casa y destroza su salón por segunda vez
El mismo conductor que hace un año se estrelló contra la fachada de la vivienda de Gordon White, un jubilado de 62 años del norte de Inglaterra, y destrozó su salón, volvió a arremeter contra su casa, según contó a la prensa este miércoles el siniestrado.
No sé, no sé. El titular resulta un poco confuso. Parece que el tipo del coche se estampó contra su propia casa. Que siendo malo, al menos acaba en él la cosa. Él se lo guisa, él se lo come. Pero no. Resulta que le destroza el salón a un ciudadano inocente (que por cierto es un fenómeno, ya veréis al final).
White descubrió al llegar a su casa en West Yorkshire que el accidente ocurrido el año pasado por estas mismas fechas, cuando un hombre se desmayó al volante de su vehículo y chocó con su casa, se había repetido. Y no sólo eso si no que también el conductor era el mismo.
Como explicó a la prensa, las obras de reconstrucción del salón acababan de terminar y el propio White empezaba apenas a recuperarse de las secuelas psicológicas que le produjo el primer accidente.
Madre mía. Es que, de verdad, pobre hombre. Porque la primera vez te tienes que quedar mal. Pero cuando ha pasado todo, ya pensándolo en frío, uno pensará que la vida ya le ha dado su ración de mala suerte y que hay que tomarse las cosas con filosofía.
Tú te dices 'Bueno, vamos a ver el lado bueno, ya tenemos excusa para cambiar los muebles del salón'. Así que te vas a Ikea y te pasas todo un día eligiendo sofá, estantería, mesa de comedor... Y una semana montándolos y rompiéndote el craneo para intentar comprender los dibujos de las instrucciones. Y de repente, cuando crees que tu salón está por fin a salvo vuelves a casa y te encuentras con que el hombre ha aparcado otra vez delante de tu televisión. Cada día me alegro más de vivir en un segundo.
Y aquí viene mi parte favorita, la de las declaraciones de los protagonistas:
"En estos momentos no puedo expresar con palabras lo que siento. Quisiera que fuera mi casa", declaró por su parte el apenado conductor.
White, que vive en ese lugar desde hace 40 años, concluyó filosóficamente diciendo: "El próximo año le esperaré y le prepararé una taza de té".
Sí, señor. Y unas pastitas para acompañar. Este hombre se merece un premio.
Vaya unas cosas raras pasan ahí fuera.
Julio 08, 2004
Presentando a nuestro otro bicho
Esta es ella en estado puro. Reventada en la playa después de una hora corriendo, escarbando y saltando sin parar, toda rebozada de arena. No se aprecia muy bien lo guapa que es en sus (poco frecuentes) momentos de tranquilidad. Pero es que la mayor parte del día se lo pasa haciendo el cabra.
Tiene dos años y medio. Llegó cuando la Piz ya tenía más de 14 años. Y la trajo loca desde entonces aunque a cambio le contagió muchísima actividad. Es inteligente y obediente como ella sola.
El veterinario que nos la dio nos dijo que era mestiza de cocker. Pero la verdad es que se parece mucho más a un setter gordon. Cuando nos la llevamos tenía un mes y me cabía en la palma de la mano. Parece mentira.
Todos los días sin faltar uno consigue hacernos reír. Y eso no tiene precio. Se nos cae la baba con ella. Se nota.
Julio 07, 2004
Cuatro meses acordándonos de ti cada día
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Te echamos mucho de menos.
Julio 06, 2004
Cabecear un balón produce lesiones cerebrales
Me encantan los estudios científicos. Será porque soy de letras (o porque llevo toda la vida jugando al fútbol y por tanto cabeceando balones) pero algunos me parecen bastante ridículos. Aunque muy divertidos.
Este no es precisamente nuevo (tiene fecha de enero de 1999) y además me lo he encontrado de rebote mientras buscaba algo totalmente distinto, pero merece la pena tenerlo en cuenta.
¿Es peligroso cabecear un balón de fútbol? Esta pregunta, objeto de debate desde hace años entre neurólogos y médicos deportivos, ocupa un lugar principal en el último número de la prestigiosa revista The Physician and Sports Medicine. En ella se publica una extensa revisión de toda la investigación existente y se concluye que, aunque hacen falta estudios adicionales, ya hay datos que sugieren una asociación entre cabecear el balón y el riesgo de lesiones cerebrales.
El trabajo ha sido realizado por investigadores del Hospital Policlínico de Harrisburg, en Pensilvania y recoge estudios muy diversos, llevados a cabo con electroencefalogramas, con tomografías computerizadas y exámenes neurológicos.
Muchos de estos estudios muestran diferencias significativas entre futbolistas y grupos de control, formados por personas que no son deportistas, en lo que se refiere a lesiones residuales cerebrales. Los autores concluyen recomendando que los entrenadores pongan especial atención en enseñar la técnica correcta de cabecear el balón y que los futbolistas conozcan que tanto rematar, como despejar de cabeza en exceso, pueden asociarse a un riesgo de lesión.
Aunque pueda parecer sorprendente, el fútbol está clasificado como un deporte de alto riesgo de lesión por la Comisión Médica del Comité Olímpico Internacional. También la Academia Americana de Pediatría llamó la atención hace dos años sobre el aumento de lesiones en la cabeza como consecuencia de su práctica.
No me puedo creer que semejante cuestión pueda provocar 'años de debate' entre esa gente. Puestos a hablar de fútbol, además, hay millones de debates más divertidos. Sólo hay que entrar en cualquier bar y ponerse a escuchar. Claro que en un bar uno no encuentra una revista como The Physician and Sports Medicine. Esto confirma que hay revistas para todo.
Y además, ¿qué pinta un grupo de americanos estudiando las lesiones que causa el fútbol? Si allí no saben ni de qué va el tema. Lo suyo es que estudiaran los efectos de arrearle batazos a una pelotita.
Pero lo verdaderamente interesante de este estudio es eso de que el fútbol es un deporte de riesgo. ¡Pues me alegro! Ya nadie podrá meterse con nosotros los aficionados del fútbol. Volvemos a ser un deporte moderno. Mucho rafting, puenting, hidrospeed y cosas raras, pero todo eso son bobadas al lado del fútbol. Para deporte de riesgo de verdad ir a rematar un corner. Deberían bautizarlo como 'cornering'.
Lo que no acabao de entender es que los americanos consideren un deporte de riesgo el fútbol teniendo ello los deportes que tienen. No me había parado a pensarlo hasta ahora pero en sus deportes nacionales (fútbol americano, béisbol y hockey sobre hielo) todos usan casco. Sólo hay que ver a los jugadores de fútbol americano. Parecen gladiadores todos forrados de protecciones.
Menos mal que están los pediatras para advertirnos. Entre poner a un niño a pegarle patadas (y algún cabezazo) a un balón o darle un casco, unas hombreras y una coquilla (esto es fundamental) y lanzarlo contra otros igual de protegidos, no hay duda. Lo peligroso es lo primero.
Vale, no es fácil de entender. Pero es porque no tenemos el argumento científico, ojo:
En realidad, un balón se convierte en un proyectil de 400 gramos, hinchado a una presión de una atmósfera. Si se golpea con una potencia media desde una distancia de 10 metros puede alcanzar una velocidad de unos 80 kilómetros por hora e impactaría con una fuerza de 116 kilopondios, que puede aumentar hasta 200 Kp si el balón es golpeado con una potencia elevada por un futbolista profesional. El problema que presentaban los balones de cuero, que aumentan su peso un 20% cuando se mojan, ya ha desaparecido con los balones fabricados a base de material sintético.
Suena exatamente igual que los problemas de física que me ponían en 2º de BUP. Por cosas como esta elegí letras. Siguen los consejos:
Sin embargo, la preocupación de los neurólogos estadounidenses se justifica por el elevado número de veces que un futbolista golpea o es golpeado en la cabeza con un balón. Los investigadores del Policlínico de Harrisburg cifran en 1.800 el promedio de veces que un futbolista golpea el balón con la cabeza en un año, a una media de cinco cabezazos por partido y nueve por entrenamiento. La mejor prevención de las posibles consecuencias de cabecear el balón está en perfeccionar la técnica. Para que el impacto sea menos intenso, se debe golpear el balón con la frente y han de utilizarse los músculos del cuello para disminuir la aceleración de la cabeza, de forma que ésta busque el balón y no al revés. Los músculos del torso también son importantes ya que la cabeza, el cuello y el tórax han de estar bien alineados para que la técnica sea la correcta y disminuya el daño causado.
Es genial. Me encanta este estudio. Primero, imaginarte al neurólogo de turno contando las veces que un tipo le da cabeza al balón a lo largo del año. Y luego explicando la mejor técnica. ¡Por cosas como estas hemos hecho el ridículo en la Eurocopa! ¿Por qué nadie de la Selección ha fichado a un neurólogo americano? Dos entrenamientos con estos tipos y aquí mete goles de cabeza hasta el masajista.
Pero por si aún no estábamos bastante preocupados, aquí viene la prueba definitiva:
Entre los estudios revisados destaca uno publicado hace dos años por el American Journal of Sports Medicine que comparaba el impacto del balón con el efecto que tienen los repetidos golpes a la cabeza en el cerebro de los boxeadores.
Vamos, igualito. Yo no sé si me da más miedo un balón de fútbol o un saco de músculos de dos metros viniendo hacia mí con el puño en alto. Estoy más que seguro que esta gente confunde el boxeo con algún otro deporte. El golf o algo parecido.
En resumen, se acabó eso de rematar de cabeza. Para los que os guste fútbol ya os habréis dado cuenta de que Maradona comprendió esto hace mucho tiempo y por eso hizo lo que hizo contra Inglaterra en el mundial de México.
Tenía que haber estudiado ciencias. Parece mucho más divertido.