Estoy puliendo los últimos detalles de una innovación tecnológica que va a revolucionar el mundo de los blogs. Si las pruebas resultan positivas y todo funciona tal cual lo planeado, ya no será necesario que visiten este sitio, ni que agregue nuevas entradas, ni que el sitio directamente exista. Seré cauto con los detalles porque la patente está en trámite, pero básicamente el sistema trabajará a base de implantación remota inalámbrica de recuerdos y sensaciones: una vez enviada la señal, todos directamente recordarán haber visitado Amor Entintado, experimentando la misma mezcla de decepción, vergüenza y lástima que resulta de una visita real.
Pronto se enterarán de más novedades al respecto. O por lo menos creerán haberse enterado.