Adultolescente

Si ves el destello, es demasiado tarde

Si reducimos el punk a una mera cuestión de bricolage, es decir, olvidamos que es un sonido y una estética concreta además de un Do It Yourself de mierda, entonces nos encontramos con que los ordenadores, los PC's del diablo, son los punks de los videojuegos. Las consolas serían la versión pija, para gente con poca habilidad con instalaciones demoniacas y parches, que lo que quiere es enchufar su PS2 a la TV, conectar el pad, y a jugar: son los fans de Pulp, punks de Carrefour. Y así serían los puñeteros PC's, si no fuera por los millones de combinaciones de hardware y software que existen. Quiero decir que en el fondo los usuarios de PC quieren lo mismo. Pero va a ser que no. Es un quiero y no puedo. Y entonces Dios creó los parches, y vio que era bueno. Todo esto viene por una encarnizada batalla que libré ayer con mi PC.

Quería instalar Operation Flashpoint, que funciona sin problemas en este ordenador. La versión que se instala por defecto es la 1.0. Como me compré la Gold Edition, además lleva actualizaciones hasta la versión 1.3, más una nueva campaña, Red Hammer. Pero es que además me compré la expansión oficial, Resistance, que además de sumar una tercera campaña del mismo título, actualiza el juego, así de golpe, a la versión 1.75. Bien. No había jugado a este juego desde el verano de 2002, lo cuál es mucho tiempo, y de repente me entraron ganas. Ayer. Porque sí. Instalé todo eso, versión 1.75. Bien. Voy a la web oficial, en busca de nuevas actualizaciones... y sí, el juego va por la versión 1.96. Bieeeeen... pues me bajo el parche correspondiente. Y la cagamos: me dice, amablemente, que ese parche sólo funciona desde la versión 1.85. Yo voy por la 1.75. Resulta que posteriormente a que yo comprara todo eso apareció una versión Game of the Year del juego, que llegaba a la 1.85. ¿Ahora qué? Encuentro otro parche que debería actualizar desde la 1.75 a la 1.90, "y de ahí actualizo a la 1.96", pensé yo, inocentemente. Cuando aplicas cada parche, el programilla comprueba los archivos originales. Y Plof!, dice que hay un montón de ellos que están mal, que vuelva a instalar el juego. ¡Pero si acabo de instalarlo! No sólo no aplica el puñetero parche, sino que encima me toca reinstalar los 3 CD's. Joder, otra hora al cuerno. Venga, reinstalo. Vuelve a decirme lo mismo.

Han pasado casi tres horas desde que tomé la decisión de volver a jugar ese juego. Pero ya no puedo abandonar, ahora es una cuestión de orgullo. Me viene a la mente aquella superstición que tenía con el Spectrum siendo un crío, cuando salía más veces de las soportables lo de R tape loading error: no hacer ningún ruido mientras cargaba, y tener buenos pensamientos. En esos momentos de desesperación, uno se agarraba a lo que fuera para que se cargara el puto Spy Hunter. Y sorprendentemente funcionaba. Los ordenadores siempre han tenido algo de esoterico. Como ya me crece la barba y todo eso, opté por algo más sencillo y racional que permanecer en silencio y tener buenos pensamientos: usar la unidad de DVD en lugar de la de CD para instalar el juego. Instalado. Aplico los parches y actualizaciones de la Gold Edition. Estoy en la versión 1.3. Decido que un Momento Google es lo más sabio antes de pifiarla otra vez. Y me encuentro con dos parches que no conocía, probablemente innecesarios por acumulación, pero que ahí estaban: uno actualiza de la 1.3 a la 1.46. Lo aplico. Dice que los archivos están bien, que en realidad era lo que yo quería saber. De momento funciona. Para alcanzar la 1.75 debo instalar Resistance. Lo hago. Sin problemas. Llega el momento de intentar alcanzar la 1.96. El segundo parche que he encontrado, en la web de Codemasters (no en la página oficial del juego, ejem...) es una actualización que, precisamente, y mira tú por dónde, actualiza el juego a la versión 1.85. Joder, ¿por qué no estaba esto en la web oficial? Lo aplico. Sin problemas, la integridad de los archivos es impecable. Otro para llegar a la 1.90. Otro para pasar a la 1.91. Los archivos siguen estando bien, no me pide que reinstale el juego. Bien. Otro para parchear la campaña original (Cold War Crisis) para que sea compatible con la 1.91. Otro que hace lo mismo con la campaña Red Hammer. Y el último, parche de la 1.91 a la 1.96. Dice que no hay problemas, que todo está bien. En total cuatro horazas de trabajo.

Merece la pena el esfuerzo por un juego, un simulador táctico-militar (no sé si es la definición acertada, pero es que por los screenshots podríais pensar que es un FPS, y no lo es) en el que hasta puedes ir en bicicleta. Si encuentras una. Cada nuevo parche, admás de solucionar bugs varios (alguno de ellos provocado por los propios parches, que viva el mundo del PC), añade al juego nuevos vehículos, nuevas armas, y nuevas misiones. Ya quisieran los consoleros una atención al juego así. Vale, bueno, poco a poco se imponen los contenidos descargables en las consolas, como los Hurricane Pack de Ninja Gaiden, o los niveles extra de Splinter Cell. Todo esto tiene su recompensa. Ahora es un juego larguísimo, en el que puedes vivir un mismo conflicto desde los tres puntos de vista: las fuerzas de la OTAN (Cold War Crisis), las fuerzas invasoras sovieticas (Red Hammer), o los habitantes de la isla que no se dejan doblegar y plantan cara con sus escopetas de caza (Resistance). Me doy cuenta de que he olvidado como jugar en cuanto nada más empezar oigo, casi de refilón, Fiuut!, y zas, alguien me ha volado los sesos. Olvidaos de la barra de energía y los power ups, porque el soldado en cuestión es humano y frágil. La próxima vez no iré corriendo de pie en campo abierto... Los rusos no desperdician las balas. También había olvidado cómo apuntar. Me pongo de los nervios cuando el que comanda el ataque me ordena eliminar a un objetivo que está a 200m, echado en el suelo. En la pantalla, apenas puedes ver su casco. Y destellos, claro, porque el cabrón te dispara, con una puntería endiablada. Y tú con tu M16, lanzando ráfagas de 3 disparos, esperando que alguna le de. Debo practicar mi puntería. Urgentemente.

Cuando salga la secuela, cambio de PC. Por cierto, se supone que ya mismo sale en XBOX. Mola, porque en teoría salía a finales de 2002/principios de 2003. Ya puede ser bueno, ya.