Adultolescente

The Authority Vs. Lobo

El primer volumen de Authority consiguió enamorarnos con su versión macarra del mundo superheróico, saltándose a la torera los arquetipos clásicos y presentando a unos personajes fuera de lo común: una pareja masculina gay, un drogata, una vieja de aspecto juvenil que fuma por los codos, otro que siente las ciudades en las que pone los pies... todo en esa línea de Incorrección Política Brutal que sólo un guionista supervillano como Warren Ellis puede parir (y me declaro adicto, FAN incondicional de cualquier cosa que venga firmada por él). En uno de los números incluso mataban a Dios, que se dice pronto. Un Dios, dicho sea de paso, muy Ellisiano, una gigantesca masa de carne que viaja por el espacio. Hoy día la serie cuenta con un segundo volumen del que, la verdad sea dicha, no he leído/comprado ni una sola página, y tampoco he escuchado/leído ningún comentario que me empuje a hacerlo (si alguno de vosotros la ha leído, no os cortéis y comentad vuestra experiencia). Entre un volumen y otro han aparecido un par de especiales. Algo llamaba la atención: paralelamente a esta serie, Ellis creó la excelentísima Planetary, toda una revisión en clave superheróica de varios tipos de "subcultura", desde la literatura pulp hasta el Heroic Bloodshed. Curiosamente, compartieron un especial con Authority, ya que ambas series forman parte del mismo Universo, el de Wildstorm, el sello creado por Jim Lee. Aprovechando que Planetary es de Wildstorm, y que Wildstorm es de DC, Planetary se han visto las caras con la JLA y con Batman. ¿Y Authority? ¿Con qué héroe DC podía cruzarse? ¡Meeeec! No, no es Superman. Es mucho mejor, un personaje a la altura de las circunstancias.

Lobo es probablemente uno de los personajes de DC más queridos por el público. Bueno, vale, a lo mejor no "el público", pero sí yo, que soy más bien Marvel Zombie. Es un asesino interestelar al que sólo le importan sus delfines, tener a su disposición bebidas que matarían a una ballena, y que jamás deja un trabajo sin terminar. Es un cabronazo con palabra. Si quieres un rival digno para Authority, ese es Lobo, sin duda.

Este Authority Vs. Lobo se plantea como secuela de aquél especial navideño de hace casi 15 años, reuniendo al mismo equipo artístico, y recurriendo al cómic primigenio para apuntalar el argumento de este especial. Nada, una tontería: nadie de Authority le hace demasiado caso a la pequeña Jenny Quantum, dado que están demasiado ocupados drogándose, metiéndose mano, o viendo pornografía, así que la niña se adentra en un lugar inexplorado de El Transporte. Allí encuentra el viejo cómic navideño protagonizado por Lobo, y eso le crea un trauma. Clama venganza, hay que matar a Lobo, porque este ha matado a Santa Claus. Mientras tanto, en otro rincón del Universo, unos alienígenas contratan a Lobo para que asesine a Authority, ya que estos mataron a Dios, su sustento (como se vio en una gloriosa saga del primer volumen). La recompensa es el mismísimo cuerpo de Dios en putrefacción. Delirtante, ¿no? Si bien la propuesta es atractiva, tanto por su argumento, como por los personajes implicados, y el equipo artístico, lo cierto es que el cómic se queda corto, con un desarrollo apresurado que nos deja con una sensación de "¿y esto es todo?". Con un reparto tan extenso, al que se le puede sacar tantísimo jugo, es un poco inapropiado colarlo en 48 páginas. Tratándose de Authority y Lobo, podríamos haber visto muchos más ostiazos, pero es lo que hay. A pesar de esa sensación de estar leyendo algo excesivamente comprimido, lo cierto es que la resolución de la trama tiene bastante gracia, el cómic está salpicado de unos cuantos chascarrillos notables a costa de ambas series, y Bisley está en plena forma, dibujando a ese Lobo hipertrofiado que todos hemos fanatizado en algún momento de nuestras vidas. Por el precio que tiene el cómic, resulta una compra recomendable-sin-pasarse. Para fans.

Por cierto, ¿se decidirá Norma a editar un tomito con Lobo: Unbound? ¿Pronto?