Recuerdo el día que leí un blog por primera vez. Era una historia sencilla, cotidiana. En ella se reflejaba el cúmulo de sensaciones que todos vivimos y sentimos a diario, pero la diferencia estaba en la capacidad de esa persona al expresarlo. No es fácil liberarse de la máscara diaria y sentarse a escribir como quien va al diván de un psicoanalista y deja fluir sus más intimas emociones, frustraciones y miedos. Todo eso y mucho más es un blog, un lugar donde compartir y aprender. Un lugar para todos.
Escrito por Vir a las Febrero 12, 2004 12:36 AM