Miente, cuando duerme miente, cuando piensa miente, miente por placer
hace que sus ojos mientan, que sus gentos mientan, lo hace sin querer
Miente, sólo me miente se que me miente ¿porqué me miente?
Siento que pierdo el sentido, que aunque mienta olvido, Que otra cosa puedo hacer
Sufro por amar con miedo, ya no se si debo, se que lo hace sin querer
¿por qué me miente?
Café Quijano
Es malo escuchar música de pensar borracho, es malo emborracharse pensando en alguien a quien tu corazón perdió por sigues viendo, es malo que te vea cuando estás borracho.
Creí que habí superado todo, pero llevo unos dias rayado de nuevo... malditas mujeres y bendita tú, aunque ahora me odies.
A mi paseo lento por el pasillo se unen algunas personas extraviadas. Todos deambulamos mirándonos a las caras, recordando lo que fue. Tras las puertas, cerradas, descansas cajas llenas de recuerdos y sentimientos. Poco a poco los habitantes de esas habitaciones, los dueños de esas cajas van desapareciendo, dejando una cama, dos estanterías y un armario vacíos, llenos de nada, como si nunca nadie los hubiese usado.
Han pasado 9 meses, lo mismo que la gestación de un niño, lo que tarda en madurar un vino, lo que dura una vaga amistad; han sido nueve meses de frío y calor humanos, de calor y frialdad humana. Nueve meses que caben dentro de una caja de cartón pero que llenan un corazón de amor, ira y ganas de no acabar.
Algunos ya se fueron, tal vez temiendo las largas despedidas, tal vez deseando por fin romper con esto. Los que quedamos vemos como cada día somos menos en la mesa del comedor; algunos lloramos en la soledad de nuestros cuarto.
Y lo peor es que no solo lloro por quienes se fueron, sino por que algunos de los que aún quedan ya me abandonaron hace tiempo.
Acabo de encontrarmela en el lento paseo por el pasillo, como es natural, no quiso unirse a la marcha de almas en pena… estaba demasiado ocupada siendo ella misma sin mí. Aún duele la cicatriz que dejó cuando se separó de mi cuerpo, aún queda un trozo de ella pegado a mi corazón. Podía irse ya y dejarme llorar su perdida como lloro las de los demás.
Soy egoísta por desear eso… soy egoísta por seguir deseandola.
Cogiste los sobres de la mesa y cerraste la puerta tras de ti. Bajaste los escalones de dos en dos, apresurado, intentando que los remordimientos que te perseguían no llegasen a alcanzarte, sabías que al llegar a la calle dejarían de seguirte y se perderían entre la multitud.
Tras la puerta dejabas una mesa vacía y una silla con restos de sangre. Un cuerpo inerte y goteando de rojo estaba sobre la alfombra; el agujero de su cabeza medía más o menos lo que el puño cerrado con que le golpeaste cuando abrió la puerta.
La pistola te pesaba en el bolsillo, cada vez más, mientras te abrías paso por la calle cada vez más llena de gente. Tu sonreías, habías sido capaz de librarte de él y habías cogido los sobres. Ya nunca más te atormentaría el verlo en tu reflejo. Estabas deseando llegar a tu casa para quemar el contenido de los sobres.
Llegaste a tu casa, abriste el portal y subiste los dos pisos. Te sorprendió encontrar la marca de un golpe en la madera de tu puerta; introdujiste la llave y entraste. Frente a ti, una mesa y una silla, ambas sobre una alfombra. Sacaste los sobres de tu bolsillo y dudaste si abrirlos; no hacía falta, sabías perfectamente lo que contenían, no había fallo.
Encendiste el mechero y les prendiste fuego. Mientras iban ardiendo el cadáver del suelo desaparecía, la sangre que empapaba tu alfombra se desintegraba, El golpe de la puerta se reparó. En cuanto el último sobre ardió acabaste de olvidar todo; ya no importaba lo que sufriste para conseguirlo, habías quemado todos tus recuerdos, habías matado al reflejo de tu espejo, habías empezado una nueva vida.
Es lo que tiene el estudiar en una de las salas de estudio del colegio mayor.... aparte de las típicas distracciones cuando la gente entra y sale, tose y ríe, habla y murmulla, te vienen a la cabeza las distracciones de los recuerdos, el dolor de ver lo conocido y añorado; el ver tu ventana. ¿Cómo hago yo para volver a concentrarme? Entierro esos recuerdos y sentimientos bajo poemas (abortos y meros apuntes que nadie más que yo se atrevería a llamar poesía). Estos son tres pequeños ejemplos. Aunque lo lógico es que tú no los leyeras por ser la destinataria, sé que lo harás: siempre encuentras mis blogs y mis libretas... curioso...
Dadaismo sentimental
Sufrir, amar, llorar.
Olvidar, amar, recordar.
Esperar, amar, desesperar.
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Sufrir es olvidar y olvidar esperar;
llorar es recordar y recordar desesperar.
-
!Sufrir, llorar, olvidar, recordar esperar, desesperar!
esto es amar.
Levantando la vista sobre mi hombro
Desde aquí veo tu ventana
con la persiana cerrada.
Nunca tu cabeza asomada
ni a la tarde ni a la mañana.
Sé que para tí ya no soy nada,
pero aún te pido una mirada.
Sombra que se interpone contra el sol
No eres más que una sombra
una sombra del pasado;
una sombra del pasado
que no permite que la luz de cada día
me alumbre.
Un recuerdo nunca olvidado,
una sombra perpetua;
un dolor para siempre...
un amor desde siempre
Destruiré este folio, apartaré estos versos de mi mente y volveré a mis apuntes, a las estrategias creativas y a la piratería publicitaria; releeré las fotocopias y volveré a subrayar los apuntes... seguro que aún así, cada vez que levante la vista por la ventana no podré evitar mirar hacia el cristal y la persiana de tu habitación.
He intentado hacer un sistema de divs que me permita hacer dos columnas para post (o una imagen y un texto al lado). Lo he probado con los dos posts anteriores y parece que, a pesar de no ir todo lo bien que debería, funciona... ya veremos....
misterioso mundo este de los divs...